La Asociación de Periodistas de Ciudad Real (APCR) ha manifestado este domingo su preocupación, coincidiendo con la conmemoración del Día Mundial de la Libertad de Prensa, ante el creciente deterioro que sufre el ejercicio libre del periodismo.
Dicho deterioro se materializa con vetos a profesionales de la información que les impiden ser testigos directos de los hechos como consecuencia de reprobables estrategias que afectan de manera perniciosa a derechos constitucionales de los periodistas y de los ciudadanos, han informado la APCR en un comunicado de prensa.
Esta asociación rechaza los intentos de convertir en irrelevante el importante papel que juegan en la sociedad los periodistas y comunicólogos, quienes están llamados a ejercer un control independiente del poder y de proporcionar información veraz, verificada y contrastada a sus públicos.
Y han recordado que, sólo de esta manera, los ciudadanos pueden tomar sus decisiones con la mayor libertad posible, así como opinar con elementos de juicio objetivos y ciertos.
Por tanto, no se concibe ningún intento de imposición de silencio informativo y han sentenciado: "sin periodismo no hay democracia, sin información los ciudadanos dejan de ser soberanos para convertirse en siervos a los que se les pueden manipular con engaños y bulos".
La APCR ha reiterado la petición a la ciudadanía para que acuda a los medios de comunicación para informarse, una necesidad que se hace más que patente ante la grave situación de emergencia sanitaria que vivimos por la gran incidencia de la COVID-19, una pandemia que desgraciadamente en la provincia de Ciudad Real se está sufriendo con especial virulencia.
La Asociación de Periodistas de Ciudad Real ha solicitado a las administraciones que apoyen el periodismo como bien público esencial y ha apuntado que no es justo que la sociedad se olvide del servicio que todos los profesionales de la información han desarrollado durante las semanas más duras de la pandemia en esta provincia.
De igual modo, la APCR ha alertado de que la precariedad laboral y salarial sobrevenida con la crisis del coronavirus es un claro impedimento para el desarrollo pleno de la libertad de prensa al crear inseguridad e indefensión a los profesionales y sus familias.
