La organización Ecologistas en Acción ha acusado a Quantum Minería de "minimizar" el impacto de la futura explotación de tierras raras que la empresa pretende llevar a cabo en el Campo de Montiel, en Ciudad Real, negando su riesgo radiológico y los daños que podría ocasionar.
En un comunicado, Ecologistas en Acción de Castilla-La Mancha ha respondido al director de proyectos de la compañía minera, Enrique Burkhalter, quien dijo que el proceso de extracción de monacita que se quiere realizar en Ciudad Real "no es comparable con el realizado en otros países, como China y Estados Unidos".
Ecologistas considera que, además de "restar importancia" al riesgo de radioactividad, Quantum obvia que de llevarse a cabo sería el primer proyecto de minería de tierras raras de Europa y, por tanto, no hay "más precedentes ni referentes que los llevados a cabo en otros territorios".
Ha recordado que ha sido el propio Consejo de Seguridad Nuclear el que ha dictaminado que el proyecto es susceptible de causar un impacto radiológico en los trabajadores, el público y el medioambiente, y ha exigido que llevar a cabo la actividad debe elaborarse "un estudio sobre el riesgo radiológico para los trabajadores y el entorno".
"Quantum ha minimizado nuevamente los riesgos del proyecto, al que compara con un simple cribado de tierras sin aditivos químicos e ignorando la magnitud del proyecto y los valores medioambientales y socioeconómicos de la comarca del Campo de Montiel", ha subrayado el colectivo.
Por otro lado, Ecologistas en Acción se ha referido a la reducción de las necesidades de agua previstas a una quinta parte, de 500.000 metros cúbicos anuales iniciales a 100.000, para "imponer sus criterios de viabilidad y minimizar las características del proyecto que pretende remover millones de toneladas de tierra en una extensa zona de elevados valores ambientales".
En este sentido, ha advertido de que "reconducir" el impacto del proyecto lo que hace es reafirmar "las graves carencias medioambientales y técnicas de una empresa que pretende ejecutar un proyecto minero que pondrá en juego nuestras recursos naturales, nuestros espacios y especies más valiosos y nuestra salud".
La organización conservacionista espera que el proyecto se resuelva "con una contundente declaración negativa de impacto ambiental".
