El Ayuntamiento de Ciudad Real pondrá en marcha una línea de ayudas para la reactivación empresarial para lo cual que trabajará en coordinación con la Cámara de Comercio y la Federación de Empresarios de Ciudad Real (Fecir) con la intención de favorecer a las pequeñas empresas y autónomos de Ciudad Real.
Así lo ha dado a conocer la alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora, quien con el concejal de Promoción Económica, Pedro Maroto, han mantenido este viernes una reunión por videoconferencia con el presidente de Fecir, Carlos Marín, y el presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Ciudad Real, Mariano León.
Zamora les ha trasladado las medidas que el Ayuntamiento está llevando a cabo para afrontar la crisis sanitaria causada por el COVID-19 y las que está preparando para asentar la recuperación económica de la ciudad tras la crisis.
En esta primera toma de contacto durante el estado de alarma, la alcaldesa ha referido a los representantes empresariales que el equipo de Gobierno municipal pondrá a disposición de autónomos y pequeños empresarios una línea de ayudas para la reactivación empresarial, que se dotará con el dinero disponible por la cancelación de actividades previstas por las concejalías durante este tiempo.
"La dotación para las ayudas vendrá de la disminución de otras partidas y estarán dirigidas a los sectores más azotados por el obligado parón económico", ha resaltado Zamora.
Además, ha ampliado que el Consistorio ha mantenido durante este periodo los servicios de tesorería e intervención "para que en ningún momento se parara el pago a proveedores" y que ha priorizado el pago a los proveedores locales, "de manera que se están firmando facturas todos los días, para favorecer que todas las empresas que prestan servicio al Ayuntamiento cobren puntualmente".
Zamora ha informado a Marín y a León que se retrasa el inicio del pago de los tributos e impuestos locales, de manera que el calendario 2020 establecerá que el primer periodo, que el año pasado fue del 20 de marzo al 30 de mayo, comenzará el 1 de junio, hasta el 14 de agosto, para el impuesto de vehículos de tracción mecánica, gastos suntuarios, entrada de vehículos a través de las aceras, quioscos y recogida de basuras.
El segundo periodo, que el año pasado fue del 3 de junio al 30 de agosto,, comenzará el 1 de septiembre hasta el 15 de noviembre, para el IBI urbano y rústico y el impuesto de actividades económicas.
"Se permitiría, así, disponer de un plazo más dilatado que en un año habitual para el pago en voluntaria de estos tributos", ha apostillado la regidora, quien ha recordado que "quienes lo necesiten, pueden solicitar el aplazamiento de las deudas y el fraccionamiento de los tributos municipales".
Los representantes de los empresarios han solicitado a la alcaldesa distintas peticiones en materia fiscal y tributaria para diferentes sectores, entre ellos para la hostelería y el pequeño comercio, que "van a ser muy perjudicados por esta crisis sanitaria", han concretado.
