CCOO y UGT han pedido a la patronal empresarial de Ciudad Real (Fecir) que deje de "echar balones fuera" y asuma su responsabilidad de negociar el convenio colectivo que afecta a los trabajadores de Ayuda a Domicilio.
Los sindicatos, en un comunicado de prensa hecho público este martes, han señalado que "los convenios colectivos los negocian los representantes de los empresarios y de los trabajadores, en este caso de las trabajadoras, que son la inmensa mayoría de las 2.000 personas que prestan el servicio de Ayuda a Domicilio en aquellas localidades de la provincia de Ciudad Real que lo tienen externalizado".
CCOO y UGT han recordado que los representantes patronales sólo han asistido a dos reuniones de la Mesa de negociación, una para recoger la plataforma reivindicativa de la parte social y otra para decir que no piensan incrementar ni un céntimo los salarios que pagan a sus plantillas.
Su excusa, han advertido, "es que la Administración regional mantiene los mismos precios públicos de este servicio desde 2013 o 2014 y con esas tarifas es difícil que las empresas puedan actualizar los sueldos".
Así, han dicho, "se cruzan de brazos y se niegan a volver a la Mesa negociadora si no acude también la Junta de Comunidades, a fin de alcanzar un acuerdo tripartito, como ha reclamado el presidente de Fecir, Carlos Marín".
En su opinión, esta postura es "una desvergüenza ya que las trabajadoras se quedarán sin convenio colectivo si ellas y sus sindicatos no ayudan primero a la patronal a conseguir mejorar los márgenes empresariales".
Han ampliado que "no dudan" de que las tarifas en cuestión puedan necesitar ya una revisión pero, entre tanto, han entendido que existe una alternativa para atender la negociación del convenio como es que "carguen las subidas salariales a los sustanciosos beneficios que obviamente han debido obtener durante los pasados siete años".
Al tiempo, han recordado al presidente de la patronal empresarial ciudadrealeña que son los ayuntamientos, y no la Junta, los que emiten los pliegos de condiciones para adjudicar la prestación del servicio de Ayuda a Domicilio a las personas mayores dependientes de sus respectivas localidades y los que, tras valorar las ofertas presentadas por las empresas interesadas, realizan las correspondientes adjudicaciones.
Esto significa, a su juicio, que "cada una de las empresas que obtuvieron esas adjudicaciones tiene un contrato en vigor con el ayuntamiento correspondiente y ese contrato no puede modificarse durante su vigencia".
"Quizás la pretensión de Carlos Marín es que, una vez las trabajadoras consigan que la Junta mejore sus tarifas vayan a negociar con cada ayuntamiento alguna fórmula de mejorar también las dotaciones de sus respectivos servicios externalizados de Ayuda a Domicilio, lo que en todo caso deberá esperar al fin de la vigencia de las actuales contratas, cada una de las cuales tiene su propia fecha de caducidad".
Finalmente, han recordado que si no se soluciona este problema el lunes comenzará la huelga en este sector que "es la única alternativa posible" que le deja la patronal empresarial a los trabajadores.
