La Audiencia Provincial de Ciudad Real ha acordado mantener la solicitud de la Junta de Comunidades de sacrificar e incinerar las 53 vacas abandonadas por un ganadero en el municipio ciudadrealeño de Navalpino, incluidas las 50 que estaban sanas y sus terneros.
Así lo ha dado a conocer la asociación Proanimal Castilla-La Mancha, que ha explicado que la Audiencia Provincial ha resuelto el recurso de apelación interpuesto y confirma el auto del Juzgado de Instrucción nº 1 de Ciudad Real.
Proanimal Castilla-La Mancha ha lamentado tener que decir que la Justicia "no muestra la conciencia necesaria y empatía hacia los animales y su bienestar", a pesar de todas las reformas legales existentes que tienden a "descosificar a los animales y regularizar el bienestar animal".
Esta asociación ha advertido que ha transcurrido más de un año desde el abandono de estas vacas, víctimas de un maltrato animal, y se podría haber realizado el correspondiente saneamiento y regularización.
Sin embargo, han dicho, "no ha sido posible ya que la Justicia y la Administración regional han mostrado falta de interés y empatía hacia los animales, a pesar de que Proanimal Castilla-La Mancha comunicó al Juzgado la voluntad de varios santuarios animales de acoger a las vacas en el momento en que pudieran ser trasladadas".
El Juzgado ofrecía únicamente la posibilidad de que Proanimal Castilla-La Mancha asumiese los gastos de regularización de la explotación ganadera y que la Consejería de Agricultura no quería asumir.
El auto de la Audiencia Provincial, dice la asociación, olvida que las actuaciones se originaron por un delito de maltrato animal, y se limita a referirse a la salud pública, que por lo que se dice, solo se salvaguarda con la muerte de los animales sanos si han de ser saneados por la Administración, pero que no se pone en peligro si es esta asociación la que costea el mantenimiento y saneamiento de los animales.
Proanimal espera que el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, "muestre ser un ejemplo para la ciudadanía en la defensa del bienestar animal y colabore con ellos, procediendo a asumir el saneamiento y regulación administrativa de las vacas sanas de Navalpino para que puedan ser trasladadas a los santuarios correspondientes".
