El agua que drena el Acuífero 23 y las últimas lluvias registradas durante el mes de abril han contribuido a aumentar las reservas del pantano de El Vicario.
Así lo ha explicado a Efe el Comisario de Aguas de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), Timoteo Perea, quien ha señalado que la mejoría en cuanto a reservas experimentada por este pantano se debe también a que apenas si se ha utilizado agua para uso de riego.
En la última semana, el pantano de El Vicario ha subido casi un 3 % sus reservas, pasando del 74,95 % de su capacidad al 77,98 % en tan sólo siete días.
El drenaje natural del Acuífero 23 sigue dejando agua en sus niveles inferiores, no ya por las últimas lluvias de estos meses, sino por su funcionamiento natural que llevan al agua a aflorar años después de ser recogida, y también son importantes, ha reconocido, los aportes que le llegan desde el Acuífero 24.
Aún cuando los acuíferos siguen aportando agua en estos momentos, sus niveles se encuentran entorno a dos metros por debajo de los niveles que presentaba el año pasado por estas mismas fechas, ha reconocido Perea
La situación del incremento de las reservas del pantano de El Vicario contrastan con las del Gasset que hasta esta misma semana seguía una tendencia descendente.
Las precipitaciones del mes de abril, ha explicado el Comisario de Aguas, ha roto esta tendencia y en los últimos siete días la reserva hídrica de este pantano ha subido 1,38 %, pasando de encontrarse del 27,98 % al 29,36 % de su mayor capacidad de embalse.
El funcionamiento de este embalse, ha señalado, "es el normal y lógico" y registra tendencia negativa porque el uso principal que se le da es el abastecimiento de agua potable a Ciudad Real y su comarca, lo que supone que registre detracciones semanales de agua.
Ha recordado que el consumo medio por habitante y día se estima en 200 litros, por lo que se necesitan, para una población de 70.000 habitantes, alrededor de 14.000 metros cúbicos diarios.
Perea ha comentado que el mes de abril está siendo "muy generoso" en lluvias, lo que está permitiendo que el conjunto de embalses de la provincia de Ciudad Real se hayan recuperado.
A ello ha contribuido, también, el que las lluvias han evitado los últimos riegos de los cereales, especialmente de las cebadas que son más abundantes y del trigo. Además, las precipitaciones también han evitado los primeros riegos de los viñedos.
En su conjunto, los embalses de la provincia están al 52,74 % de su capacidad y ello supone que este año volverán a estar asegurados todos los usos del agua, desde el abastecimiento a los caudales ecológicos y regadíos.
No obstante, Perea ha advertido de que hay que ser prudentes de cara a ver cómo se presenta el verano y el otoño, y ha precisado que si las temperaturas son altas y hay una importante evaporación las reservas mermarán, como también si el otoño vuelve a ser escaso de lluvias como lo ha sido el de este año.
Por eso, ha insistido en ser prudentes en el uso del agua y ha significado, en el caso de los usuarios de los embalses, que deben ser ellos mismos los que vayan adecuando sus demandas a las reservas existentes.
De momento podrán tener agua para varias campañas de riego, en caso de que la sequía persista y las precipitaciones no permitan la recuperación de los embalses, ha terminado.
