El Servicio de Patrimonio y Cultura de la Dirección Provincial de Educación, Cultura y Deportes de Albacete, dependiente de la Viceconsejería de Cultura de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha, ha emitido una resolución favorable a la construcción del edificio contenido en el proyecto de recuperación y consolidación del castillo de Almansa.
El dictamen favorable recogía los acuerdos alcanzados en la Comisión Provincial de Patrimonio celebrada en el mes de abril, en la que se adoptaban una serie de pequeñas modificaciones técnicas referidas a la solución del cerramiento del muro norte, a una mínima modificación de la altura y retranqueo del edificio y al acuerdo final en el recorrido de las visitas al monumento, cumpliendo en todo momento con la Ley de Patrimonio Cultural de Castilla La Mancha y el Código Técnico de Edificación, según ha informado el Ayuntamiento en nota de prensa.
El citado acuerdo supone dar luz verde definitiva a la solución arquitectónica y a la protección de los restos arqueológicos aparecidos en las excavaciones, lo que ocasionará la vuelta a las obras durante el mes de junio, cumpliendo de esta manera con los plazos establecidos por el Ministerio de Fomento de acuerdo al programa del 1,5 por ciento cultural.
El alcalde de Almansa, Francisco Núñez, ha manifestado su "enorme satisfacción" por haber llegado a una solución técnica pactada entre las dos administraciones públicas después de múltiples reuniones y propuestas, agradeciendo a los técnicos del proyecto, a los técnicos municipales y a los de la administración regional su celeridad y disposición para su trámite.
Del mismo modo, ha reconocido la intermediación positiva del consejero de Educación de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha para conseguir el citado acuerdo.
Por último, el regidor almanseño ha añadido la importancia de la recuperación y puesta en valor del castillo de Almansa, que concentra el potencial turístico de la Ciudad, y que permitirá visitar espacios cerrados al público, así como comprender y entender su funcionamiento a través de los restos arqueológicos, dándole por primera vez una dimensión turística, histórica, arqueológica, pedagógica, didáctica y turística, que se traducirá sin duda en un impacto económico y patrimonial esencial a partir de 2019.
