La Gerencia de Atención Integrada de Albacete ha iniciado este jueves el proceso de recuperación de una parte de la actividad quirúrgica programada, con la realización de cinco cirugías en los quirófanos del Hospital Universitario Perpetuo Socorro, una vez que se ha reducido el número de ingresos por COVID-19.
El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) del que depende la Gerencia ha informado en una nota de prensa de que la evolución de la pandemia ha permitido "diseñar un protocolo de actuación para ir recuperando la actividad quirúrgica programada, concretamente, de determinadas cirugías de patología oncológica" y ha precisado que de los 545 pacientes hospitalizados el 1 de abril se ha pasado a 209 en todo el Complejo Hospitalario de Albacete (CHUA).
De este modo, este jueves se han realizado las primeras cirugías en dos quirófanos del Bloque Quirúrgico del Hospital Universitario Perpetuo Socorro, un área que había reconvertido sus instalaciones en Unidad de Cuidados Críticos y Cuidados Intermedios de Anestesia, para aumentar la capacidad de respuesta de los hospitales de Albacete ante el coronavirus.
La gerencia ha agradecido "el trabajo realizado y que siguen realizando" los profesionales del Servicio de Anestesiología y Reanimación de la Gerencia, así como el personal de Enfermería, técnicos en cuidados, celadores, limpieza, tanto de la propia UCI-Anestesia como de los bloques quirúrgicos, que "se han adaptado a una presión asistencial sin precedentes", y donde aún quedan pacientes ingresados en críticos.
La Gerencia y el Sescam han informado, a su vez de que en este momento, en el Hospital Universitario Perpetuo Socorro solo quedan pacientes COVID-19 ingresados en las plantas primera y tercera, así como en la UCI-Anestesia situada junto al Área Quirúrgica.
Por lo tanto, las plantas cuarta y segunda ya son "zonas No-COVID", algo que ha permitido recuperar la actividad en la Unidad de Trastornos del Comportamiento Alimentario (UTCA) que han vuelto a su espacio habitual en la segunda planta.
El gimnasio de Rehabilitación, otra de las áreas que se habilitó como zona de ingreso, ya no tiene pacientes ingresados aunque, de momento, las instalaciones se quedan preparadas como hospitalización, por si fuera necesario utilizarlas.
Igual ocurre con las áreas de hospitalización que se habilitaron en las salas de espera de consultas externas, con capacidad entre 60 y 72 camas.
