El Gobierno de Castilla-La Mancha ha comenzado las obras de remodelación integral del Hospital de Hellín que el próximo mes de octubre cumplirá treinta años y que el 28 de mayo registró un incendio que afectó a parte de la infraestructura.
La intervención se está realizando en las 61 habitaciones de hospitalización de las tres plantas del centro sanitario y en las zonas de personal y, mientras tanto, continúan los trabajos de reparación en la zona afectada por el incendio del pasado 28 de mayo, según ha indicado la Junta de Comunidades en una nota de prensa.
Las labores de reforma se realizan simultáneamente en tres fases, que son la zona de hospitalización, la zona afectada por el fuego y la renovación del sistema de climatización.
En las plantas de hospitalización, además de la renovación del sistema climático, se están remodelando todos los aseos, así como la instalación eléctrica y las puertas de acceso, con las que se va a ganar luz y espacio.
Sanidad ha destacado que "con esta actuación, se consigue mayor confortabilidad para los pacientes y habitaciones mejor adaptadas".
Se van a sustituir alrededor de 1.500 metros cuadrados de alicatados entre baños y zonas del personal, así como todos los aparatos sanitarios de estas dependencias.
Por otra parte, una vez desescombrada y limpiada la zona donde se originó el incendio, se está procediendo al refuerzo de la estructura.
El Gobierno regional ha recordado que, tal y como explicó hace unas semanas el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, "de una desgracia ha salido una oportunidad y se va a hacer una remodelación casi total del centro".
La última obra de envergadura tuvo lugar hace diez años y ahora se está reformando lo que quedó pendiente, con una inversión que ronda los dos millones de euros.
Por otra parte, la Gerencia de Atención Integrada de Hellín está también optimizando sus espacios para adaptarse a la "nueva normalidad".
De este modo, se ha dotado de medidas de protección y seguridad a los centros de Atención Primaria del área y en el Hospital se va a adecuar una sala de espera para separar las Urgencias Pediátricas de la de adultos, con dos circuitos diferenciados dentro de cada sección, para pacientes respiratorios y para el resto de patologías.
Se han organizado los accesos para un tránsito diferenciado, se han colocado cintas separadoras de orientación y los profesionales son los encargados de informar, dirigir el movimiento de personas y recordar a los ciudadanos la necesidad de llevar mascarillas, una correcta higiene de manos y mantener la distancia de seguridad.
También, como medida de protección y seguridad, se están instalando mamparas en el hospital, los centros de salud y los Puntos de Atención Continuada.
