Los novilleros albaceteños Alberto Pozo y Sergio Felipe cortaron este lunes una oreja cada uno en la segunda novillada picada de la feria de la Virgen de los Llanos de Albacete, en la que Martín Escudero se fue de vacío.
FICHA DEL FESTEJO.- Novillos de Alcurrucén, primero, tercero y cuarto con el hierro de Lozanos Hermanos, bien presentados, noblotes y desrazados. El más toreable, el cuarto. Pitado el arrastre del quinto.
Alberto Pozo: media caída (silencio tras aviso); y pinchazo y estocada desprendida (oreja tras aviso).
Sergio Felipe: estocada y dos descabellos (oreja tras aviso); y tres pinchazos, estocada y dos descabellos (ovación tras aviso).
Martín Escudero: estocada (silencio); y estocada (ovación).
La plaza tuvo media entrada en tarde soleada y de agradable temperatura.
Dos orejas entre el sopor
La novillada que "echaron" este lunes los hermanos Lozano con dos de sus tres hierros ganaderos fue tan noble como insulsa. Novillos que se movían pero sin entrega ni empuje, frente a los cuales los tres espadas actuantes han mostrado sus armas novilleriles.
Alberto Pozo pasó totalmente inadvertido con su desrazado primero en una labor de pases sueltos. Sin embargo supo aprovechar las cualidades del novillo más toreable del envío para cortarle una oreja tras una faena voluntariosa.
Sergio Felipe llevó a cabo una primera labor en la que anduvo en todo momento por encima de las cualidades de su antagonista. Oreja como premio a tanta entrega. En el quinto volvió a demostrar la misma dimensión pero menos tino con los aceros.
Martín Escudero tampoco pudo hacer gran cosa en su primer trasteo, mostrándose algo más entonado frente al sexto, aunque sin llegar tampoco a calentar lo suficiente.
