El concejal de Economía y Hacienda en el Ayuntamiento de Madrid, Carlos Sánchez Mato, ha pedido este miércoles en Albacete un nuevo marco de financiación para las administraciones locales y ha defendido poner a las personas "y sus necesidades" como "el norte" de las políticas municipales.
Sánchez Mato ha participado en una jornada de trabajado organizada por el Grupo provincial Ganemos-Izquierda Unida, celebrada bajo el título "La gestión económica en los Ayuntamientos del Cambio", y donde el edil madrileño ha atendido a los medios de comunicación.
El concejal de Economía y Hacienda ha explicado que los llamados "ayuntamientos del cambio", entre los que se incluye Madrid, están demostrando que "hay otra forma de solucionar los graves problemas" de los ciudadanos, y que existe "una alternativa" en la política económica a "la ortodoxia que se ha impuesto en la Unión Europea y que se sufre especialmente" en España.
Carlos Sánchez Mato, que ha estado acompañado de los diputados provinciales de Ganemos-IU en la Diputación de Albacete, Victoria Delicado y José Ignacio Díaz, ha enumerado los éxitos de esas alternativas, citando "Madrid, Barcelona, Coruña, Santiago de Compostela, Cádiz, Zaragoza, Valencia o Rivas Vaciamadrid", con administraciones que están poniendo en el centro de la gestión a "las personas, sus necesidades y la emergencia social, que tiene que ser el norte de las políticas".
El concejal ha destacado que en Madrid, y en dos años, se ha subido gasto social en un 53 por ciento y el próximo año dedicarán 800 millones de un total de 5.000 a prestaciones sociales, promoción de vivienda para alquiler o atención a inmigrantes.
El concejal madrileño ha defendido que las leyes sean un "auxilio" de los representantes públicos y no un obstáculo y ha reclamado "otro marco" con más y mejor financiación local.
El edil, a preguntas de los periodistas, también se ha referido a la polémica por el minuto de silencio guardado hoy en el Congreso tras conocerse el fallecimiento de la senadora Rita Barberá y ha asegurado que la exalcaldesa de Valencia estaba "imputada por delitos graves", no era diputada, y por tanto "no tiene lógica que se le haga un reconocimiento" en el Congreso de los Diputados.
