Ecologistas en Acción denuncia el sigilo de la Junta en la autorización del 'fracking'

En un comunicado de prensa, los ecologistas señalaron que se está actuando "de tapadillo" y ello está provocando que no haya llegado información oficial ni siquiera a los propios Ayuntamientos

Ecologistas en Acción denunció el "sigilo y el silencio' en el proceder administrativo de la Junta de Castilla-La Mancha en la aprobación de proyectos de investigación de yacimientos de gas no convencionales, técnica que se conoce internacionalmente como 'fracking'.

En un comunicado de prensa, los ecologistas señalaron que se está actuando "de tapadillo" y ello está provocando que no haya llegado información oficial ni siquiera a los propios Ayuntamientos y que mientras en algunas comunidades autónomas como Cataluña se deniegan proyectos de investigación en Castilla-La Mancha se autorizan sin darle la suficiente información pública.

En este sentido, los ecologistas denunciaron que en este tipo de autorizaciones se aprecia, una vez más, "la complicidad de los gobernantes que se doblegan ante los lobbies energéticos, poniéndose a su disposición".

Además, indicaron que a los políticos regionales les preocupa muy poco los problemas que puedan surgir en torno a este tipo de explotación gasística, como puede ser la afección a la contaminación de las aguas subterráneas o la afección a espacios protegidos como el parque de las lagunas de Ruidera.

Ecologistas en Acción anunció que se va a unir a las campañas de protesta que se están dando en los diferentes municipios afectados por los proyectos de investigación ya autorizados en la región.

Desde esta organización conservacionistas se han posicionado en contra de los proyectos de investigación en varios pueblos de la comarca de Montiel en Albacete, El Bonillo, Munera, Lezuza, Ossa de Montiel, Viveros, El Ballestero y Villarrobledo, y en Alhambra, en la provincia de Ciudad Real.

El fracking consiste en realizar perforaciones en vertical entre 2.000 y 5.000 metros de profundidad, para después hacer también ramificaciones horizontales, en más o menos las mismas distancias e inyectando a presión grandes cantidades de arena mezclada con numerosos productos químicos altamente tóxicos con los que se consigue extraer el gas enquistado en las rocas madre.

Esta técnica, tremendamente agresiva con la que se perfora y comunica en el subsuelo lo que se encuentren a su paso, está prohibida en varios países europeos, entre ellos Francia, "por ser altamente contaminante y destructora".

Según los ecologistas, en Estados Unidos es donde más se ha desarrollado, "habiéndose quedado territorios totalmente desolados una vez se han abandonado los pozos, quedando las zonas yermas y áridas.

Los ecologistas recordaron que se ha llegado a dar casos en los que ha salido gas por las tuberías del agua en algunas viviendas "al comunicar acuíferos entre sí" y que, además, "se ha demostrado que en zonas donde se está actuando están proliferando los movimientos sísmicos".

Ecologistas en Acción recordó su apuesta por un nuevo modelo energético basado en las energías renovables que vaya reemplazando, a la vez que reduciendo, los altos grados de dependencia que tenemos de las energías fósiles, una de las mayores causantes de la contaminación del planeta.

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