La alcaldesa de Albacete, Carmen Bayod, ha dado a conocer las medidas de fomento del uso del transporte urbano, que implican abaratar algunos de los bonos existentes y establecer otros nuevos, "con un coste de unos 300.000 euros" y que se instalarán "en breve".
Lo que se va a impulsar, ha concretado en rueda de prensa, es "una importante reducción en el precio para quienes más lo necesitan", como jubilados, que "pagaban 20,5 euros para viajar ilimitadamente durante todo el año" y ahora el precio del bono "se ha reducido a cinco euros anuales".
En el caso de los jóvenes menores de 30 años, "se va a crear un bono anual por un coste de 40 euros, para viajar ilimitadamente" y el precio del bono mensual, que existe actualmente por 15 euros, "lo podrán disponer por un precio de 10 euros al mes".
Bayod ha indicado también que se va a crear "un bono anual para familias numerosas, para viajar ilimitadamente por 40 euros", y que se une a las medidas anteriores, que tienen "un matiz social"
Pero, ha añadido, para lograr el objetivo del fomento del transporte urbano, "hemos creado un bono mensual para todo tipo de usuarios" y hacer del autobús "una alternativa real al coche". Un bono que tendrá un coste de 15 euros para viajar de forma ilimitada cada mes.
Son unas medidas que "van a suponer un coste de unos 300.000 euros al año" y que es una cantidad que "hoy sí puede poner el Ayuntamiento encima de la mesa" y que "sí será eficaz" para fomentar y facilitar el uso del autobús.
"De momento, y de manera inmediata, unas 15.000 personas se van a ver beneficiadas por estas medidas" y que, a quienes hayan adquirido este bono al precio antiguo para este año, "el Ayuntamiento les abonará la diferencia".
Para la alcaldesa, en Albacete se cuenta con un servicio de transporte urbano "de gran calidad" y "útil" pero las medidas previstas "van a fortalecer" este medio de transporte para que sea "una alternativa real" al uso de los vehículos privados.
A lo largo del 2014, destinó 3,6 millones de euros al mantenimiento de este servicio, que es "un 65 por ciento del coste del servicio" ya que el resto procede del importe que pagan los ciudadanos y "se ha conseguido hacer sostenible el servicio".
Una situación distinta a la del 1,5 millones de euros de deuda que el Consistorio mantenía "en el año 2011 con la empresa concesionaria".
