¡Hay que volar la Sagrada Familia! La obsesión del Daesh con el templo cristiano

Estado Islámico saca la basílica en la portada de su revista. La religión, las consecuencias económicas de atentar contra zonas turísticas y la repercusión mediática, claves

¡Hay que volar la Sagrada Familia! La obsesión del Daesh con el templo cristiano
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Según informa en un interesante reportaje David López Frías en EL ESPAÑOL, Estado Islámico acaba de lanzar el último ejemplar de 'Rumiyah', su revista de propaganda más importante. La portada de esta edición es la Sagrada Familia. Sigue en su punto de mira. Aunque los terroristas que atacaron en La Rambla y Cambrils el 17 de agosto no consiguieron atentar contra la basílica catalana, DAESH sigue insistiendo en el templo de Gaudí. Los terroristas han demostrado su obsesión por este monumento cristiano. En EL ESPAÑOL buscamos las claves con especialistas en yihadismo.

Mohamed Houli, uno de los pocos supervivientes de la célula terrorista de Ripoll, confesó al juez que la Sagrada Familia era el principal objetivo de los atentados, tal y como reveló en primicia EL ESPAÑOL. Explotar allí una furgoneta llena de explosivos era el plan A de los radicales. Pero la munición estalló por accidente la noche de antes y el plan fue abortado.

Aunque el ataque a la basílica no se materializó, el aparato de comunicación de DAESH contó el ataque como una victoria. Al menos de forma propagandística. Y es que la otra publicación referente del Estado Islámico, llamada Al Naba, también llevaba en portada el monumento, en este caso tintado de rojo. Fue publicada la última semana de agosto, tras los atentados. En el interior se incluía una completa infografía sobre los atentados y la Sagrada Familia, a pesar de que salió intacta.

El último encuentro del templo barcelonés con el terrorismo yihadista tuvo lugar el martes pasado: los Mossos d'Esquadra desplegaron un operativo antiterrorista en el entorno del monumento. Durante toda la tarde, efectivos de la policía catalana acordonaron la zona e identificaron a los ocupantes de un par de furgonetas sospechosas de llevar explosivos. Los propios Mossos informaron al detalle de la operación en redes sociales, conminando a los barceloneses a que se alejasen del lugar en tanto duraba el opeartivo. Finalmente resultó ser una falsa alarma, pero las alertas se disparan cuando se trata de la Sagrada Familia.

A finales de agosto, poco después del atentado y de la publicación de la portada de Al Naba, desde la Asesoría de Inteligencia y Consultoría de Seguridad intentaron desviar la atención del monumento. Declararon a Europa Press que los datos que manejaban no hacían sospechar que la Sagrada Familia fuese un objetivo de los terroristas, y que la relación del monumento con los yihadistas se debía más a una cuestión de narrativa de los medios de comunicación españoles. Esa versión ha quedado totalmente desmentidaposteriormente con dos actuaciones: la primera fue la confesión del terrorista Mohamed Houli, que reconoció que la basílica era el principal objetivode los ataques era el templo cristiano. La segunda fue la rápida respuesta de Mossos cuando entró una alerta por posible ataque terrorista en el entorno de la basílica. La publicación de Rumiya esta semana no ha hecho más que confirmar la obsesión del DAESH por este monumento.

De haber conseguido atentar contra la basílica, hubiese sido la primera vez que el DAESH atacaba un templo cristiano en Europa. Y a la vista de la repercusión que le siguen dando a la Sagrada Familia desde EI, todo hace pensar que no se han olvidado de ella. Lo primero que viene a la cabeza cuando se analiza esta fijación por el monumento modernista es que representa a la religión cristiana. A los 'cruzados', como denominan de forma peyorativa los terroristas a los cristianos. Pero existen otras iglesias y catedrales en el continente y en los países amenazados por los terroristas que también son símbolo de la cristiandad. ¿Por qué esta obsesión por la Sagrada Familia?

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