El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha llamado a la sociedad catalana a manifestarse "pacificamente para defender la libertad, la democracia y, por encima de todo, la dignidad del pueblo" de cara a la sentencia del Tribunal Supremo sobre el proceso independentista.
Lo ha dicho este sábado durante un acto de JxCat en el Centre Cultural de Terrassa (Barcelona), donde también han intervenido los expresidentes de la Generalitat Artur Mas y Carles Puigdemont, y la portavoz de JxCat en el Congreso, Laura Borràs, ante unas 700 personas.
Ha añadido que la sentencia cerrará una etapa reactiva y se abrirá otra en la que, según Torra, tomarán la iniciativa con el objetivo de la independencia, y ha asegurado que Cataluña es "un país a punto" que sería imparable sin el lastre del déficit fiscal, en sus palabras.
También ha destacado que a Cataluña la avalan las cifras económicas y que esta nueva etapa, a la que ha calificado de 'New Deal', deberá "dejar los intereses de partido de lado" y pensar en las generaciones futuras.
Torra tiene plena confianza en los catalanes, "consciente de la aspiración de libertad" de Cataluña, y está convencido de la nación libre e independiente que quiere construir, ha añadido literalmente.
Además, ha pedido que no tengan miedo de ser hombres y mujeres libres: "Que nos mantengamos firmes por nuestra dignidad. La represión nunca ha vencido a los catalanes, siempre la dignidad ha ganado y lo volverá a hacer".
Se ha mostrado satisfecho por las listas de JxCat a las elecciones generales porque tienen "la credibilidad del trabajo hecho", y ha reconocido la labor de JxCat en el Congreso, ya que el trabajo que han hecho les avala para el que harán tras los comicios, ha dicho Torra.
Y ha ensalzado la figura del expresidente Puigdemont, de quien ha asegurado que simboliza "el espíritu de la libertad de voto, de no rendirse, de ir siempre adelante a pesar de todas las calumnias", ya que ha dicho que le han atacado desde todos los frentes, pero que representa lo mejor del 1-O.
En el acto han intervenido conjuntamente también miembros de la candidatura del JxCat al Congreso y al Senado para el 10 de noviembre, así como los consellers de JxCat Meritxell Budó, Damià Calvet, Mariàngela Villalonga, Àngels Chacón y Jordi Puigneró.
También han hablado diputados de JxCat en el Parlament, y la líder del partido en el Ayuntamiento de Barcelona, Elsa Artadi, y otros cargos electos, que han realizado una intervención conjunta que ha terminado entre aplausos y gritos de 'Independència' y una parte del público ha desplegado un cartel donde se podía leer 'Platem cara'.
UN GRAN GESTO DE PAÍS
De su lado, el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha pedido "un gran gesto de país" en Cataluña tras las elecciones generales del 10 de noviembre, por la libertad, la absolución y la independencia, en sus palabras.
En una videoconferencia ha asegurado que ningún candidato a la Presidencia del Gobierno podrá decir a JxCat "gracias a cambio de nada"; ha defendido que la propuesta de su formación es firme, solvente y con eficacia probada, y ha ensalzado a Borràs como una mujer valiente que ha puesto voz a los políticos indepedentistas encarcelados.
También ha dicho que el 10 de noviembre es una oportunidad para ir a las urnas "contra las condenas y la represión", y que su respuesta debe estar canalizada por los votos, por lo que ha pedido consenso.
"Ante las brigadas jurídico-sociales dispuestas a secuestrar las urnas y los votos, nuestra respuesta ha de ser canalizada a través de urnas y votos", ha insistido.
Para él, la política estatal quiere "cronificar el conflicto catalán", pero ha sostenido que esto precisamente ha cronificado una inestabilidad política estatal, con cuatro elecciones generales en cuatro años.
También ha acusado al Estado de no saber garantizar los derechos fundamentales de los presos independentistas y de "haber jugado con unas personas que esperan justicia, filtrando las especulaciones de una sentencia".
Lo ha atribuido a "la venganza y el escarmiento del Estado español contra el espíritu democrático", que ha definido como mayoritario en Cataluña, y ha recordado que el 16 de octubre se cumplirán dos años de la entrada en prisión de Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, mientras los exconsellers Josep Rull y Jordi Turull han cuplido 600 días en la cárcel.
Puigdemont ha dicho que el Estado "y sus cómplices" les han robado los años que llevan encarcelados, y considera que esto es la expresión de lo que quieren que pase con el pueblo de Cataluña.
EL ESPÍRITU DEL DICTADOR
Por su parte, el expresidente de la Generalitat Artur Mas ha asegurado que puede que vayan a sacar a Francisco Franco del Valle de los Caídos, pero "mientras haya gente en la prisión y el exilio el espíritu del dictador aún estará" presente.
Mas ha calificado de "innoble, indecente e inmoral" que en el Parlament se acuse al presidente de la Generalitat de connivencia con la presunta organización de actos violentos, y ha defendido que no tienen pruebas de ello.
Ha sostenido que el independentismo defiende una causa, no solo noble, sino justa, ante "la negativa histórica del Estado español de buscar soluciones desde la política y el acuerdo", y ha asegurado que están con el corazón encogido esperando una sentencia que no debería haber existido, en referencia al fallo del Tribunal Supremo por el proceso independentista.
Se ha dirigido a los miembros de la candidatura de JxCat al Congreso y al Senado y les ha pedido que sean "los portavoces del progreso, de la gente y la libertad de Cataluña", tras lo cual parte del público ha desplegado una gran bandera 'estelada', entre aplausos.
"Sabéis que esta causa por la independencia, aparte de muchos represaliados, acumula sucesión de presidentes", ha ironizado Mas en referencia a Puigdemont y Torra, a quienes ha defendido.
"Te agradezco que en estos momentos vayas con tu espíritu y ejemplo pulcramente pacífico y des un buen mensaje de pedagogía", ha dicho a Torra, cuyo discurso ha introducido Mas.
