El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) ha realizado en el primer semestre del año un total de 2.609 derivaciones de procedimientos quirúrgicos a la sanidad privada y 37.463 de técnicas diagnósticas, mientras que no ha habido ninguna derivación de consultas externas.
Estos datos se recogen en el informe al que ha tenido acceso Efe sobre programas especiales de listas de espera que el Gobierno regional, en aras a la transparencia, ha remitido a la Mesa de las Cortes de Castilla-La Mancha, que lo ha calificado y enviado, a su vez, a los grupos parlamentarios.
El informe recoge que en todo el año 2014 hubo 8.348 derivaciones quirúrgicas y en el año 2015, un total de 7.905, mientras que en los primeros seis meses de este año ha habido 2.609.
En concreto, 1.150 en Albacete, 182 en Villarrobledo, 8 en Puertollano, 45 en Tomelloso, 25 en Alcázar de San Juan, 482 en Guadalajara, 542 en Toledo y 175 en Talavera de la Reina.
Por otra parte, se han producido 37.463 derivaciones de técnicas diagnósticas en el primer semestre del año, mientras que en los doce meses de 2014 hubo 52.021 y en 2015, un total de 61.028.
El Sescam reconoce en el informe que, a pesar de haberse producido un notable aumento de los recursos humanos, ha habido un incremento de las derivaciones de técnicas diagnósticas motivado por "la obsolescencia del parque tecnológico" del sistema público de salud.
Para hacer frente a este problema, apunta, se ha puesto en marcha un plan de renovación de alta tecnología en el Sescam.
En concreto, ha habido en el primer semestre del año 14.199 derivaciones de pruebas diagnósticas en el Hospital de Albacete; 10.696 en el de Ciudad Real; 710 en el de Puertollano; 1.150 en el de Manzanares; 501 en el de Valdepeñas; 450 en el de Tomelloso; 64 en el de Alcázar de San Juan; 2.534 en el de Toledo, y 7.159 en el de Parapléjicos.
El documento remitido a las Cortes regionales también recoge que no ha habido derivaciones de consultas externas durante el primer semestre de 2016 frente a las 463 que hubo en todo el año 2015 y las 150 de 2014.
Las derivaciones de esta tipología correspondían, principalmente, al Hospital de Tomelloso y, en menor medida, al de Puertollano.
La prestación pública de servicios sanitarios a través de medios ajenos está recogida en la ley de Ordenación Sanitaria de Castilla-La Mancha del año 2000, que apunta la posibilidad de establecer conciertos o convenios singulares de vinculación, teniendo en cuenta el principio de complementariedad.
En la derivación de pacientes, según se expone en el informe, intervienen los centros hospitalarios del Sescam, los centros privados, los servicios centrales del Servicio de Salud y el propio paciente, lo que hace que "se deban buscar fórmulas de contratación de servicios ágiles, sencillos y con capacidad de negociación y respuesta dentro de la normativa legal vigente".
Este tipo de convenios, continúa, permiten contar con los avances de las nuevas tecnologías, así como utilizar un procedimiento que posibilita una mayor flexibilidad y agilidad administrativa.
También "consigue adaptar mejor las necesidades reales de prestaciones sanitarias que tiene el Sescam y la oferta que de la mismas pueden hacer los centros privados obteniéndose una capacidad de respuesta mucho más rápida, eficiente y sencilla".
Además, se establece una mayor competencia entre los centros privados que ayuda a mantener una mejor variedad, calidad y régimen de tarifas y hace posible que el paciente sea atendido en centros próximos a su localidad de residencia "evitándole desplazamientos innecesarios".
El Gobierno castellano-manchego añade en el documento enviado al Parlamento autonómico que el Sescam está realizando "diferentes medidas para mejorar los indicadores de actividad, tanto desde el punto de vista de la mejora de los protocolos asistenciales como desde el organizativo y de gestión".
