El candidato por Vox a la Presidencia de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, David Moreno, ha manifestado que, a pesar de los cuatro diputados y los más de 137.600 votos obtenidos en las elecciones de este domingo, "no es un día para celebrar" ya que el objetivo de que las políticas socialistas fueran "desterradas, no se ha conseguido".
Moreno ha felicitado a Emiliano García-Page por el resultado y ha explicado en una rueda de prensa, tras confirmarse la mayoría absoluta del PSOE, que a pesar de estar "muy contentos" por superar las expectativas con esos cuatro diputados, "que continúe gobernando la izquierda y el Partido Socialista en Castilla-La Mancha supone una continuidad que afecta a las familias, a los jóvenes y a las empresas de Castilla-La Mancha".
No obstante, Moreno ha señalado que su partido va a liderar la oposición "al socialismo representado por Page, que es el representante de Pedro Sánchez aquí en Castilla-La Mancha" y ha destacado que "Vox entra con mucha fuerza en las Cortes" con un equipo "muy preparado y lleno de ganas" para defender sus ideas.
Asimismo, ha señalado que lo que está "en riesgo", tras confirmarse la continuidad del actual presidente regional, es "que se pierdan otros cuatro años de desgobierno, de despilfarros, de ruina y de no solucionar los problemas que afectan a tantos castellanomanchegos".