Izquierda Unida ha lanzado el proyecto "Convocatoria por Castilla-La Mancha" y ha animado a sus afiliados en la región a participar y construir una unidad popular porque "solo el pueblo puede salvar al pueblo".
Así lo ha expresado el coordinador regional de IU, Juan Ramón Crespo, en una carta a los afiliados de la formación política de izquierdas que ha hecho llegar también a los medios de comunicación.
Tras un año "de intenso y extenuante trabajo político" y tras afrontar cinco elecciones en tres citas electorales, Crespo ha agradecido a la militancia la labor realizada y ha asegurado que comienza una etapa nueva con "ilusión" por la presencia de ministros de la formación en el Gobierno de España.
En 2020, ha apostado por "cargar las energías y aunar esfuerzos" para hacer frente "al mayor peligro" que ha considerado que es "el avance de la extrema derecha y derecha extrema que, envuelta en su patriotismo de pulsera y en sus discursos de odio, van a utilizar todas las herramientas a su alcance para destruir y acabar con los avances sociales".
Por tanto, ha apuntado que la obligación de IU es "construir un muro ante el avance de la ultraderecha", basado en primer lugar en cubrir las necesidades más básicas de la clase trabajadora y no permitir que "las miles de personas que se han arrojado a sus brazos por pura desesperación", ha opinado, sirvan para que crezcan con un discurso de "odio, racista, patriarcal e intolerante ante la crisis que llega".
Por el contrario, Crespo ha abogado por la "esperanza" y por construir un proyecto "unitario" de acción política y social para la región a través de "Convocatoria por Castilla-La Mancha", una iniciativa que la formación aprobó el verano de 2019 y dejó aparcada hasta que finalizaran los períodos electorales.
Un proyecto que, ha escrito, no es electoral ni una coalición de partidos así como tampoco una marca blanca, sino que es un proyecto programático que "se sirve y crece de la movilización social en todas sus expresiones" y que trabaja con asuntos como la despoblación, el feminismo, el agua, la precariedad en el empleo y los servicios sociales.
La finalidad, según el líder regional de IU, es potenciar el espacio, "más popular que populista", que sea capaz de articular "una masa social crítica" teniendo en cuenta que "hay que unir, bajo un eje común, a la mayor cantidad posible de sectores afectados y sufridores de la explotación capitalista", ha concluido.
