El candidato de Unidas Podemos a presidir el Gobierno de Castilla-La Mancha, José García Molina, ha anunciado que va a poner su cargo a disposición del partido y que pedirá al Consejo Ciudadano que acepte su dimisión como secretario general de la formación naranja.
En declaraciones a los medios de comunicación en la sede de Podemos en Talavera de la Reina, donde ha seguido la jornada electoral, García Molina ha reconocido que él es el principal responsable de los resultados de su partido, que ha dicho que "son los peores".
De hecho, Unidas Podemos no ha obtenido ningún escaño en las Cortes regionales en las elecciones autonómicas de este domingo, mientras que en las de 2015 logró dos diputados y en 2017 cerró un acuerdo de gobierno con el PSOE en la región, que hizo vicepresidente segundo de la Junta a García Molina.
Ha justificado su falta de apoyo en las urnas a una recuperación "espectacular" del PSOE y ha subrayado que no se han cumplido sus objetivos de seguir en el Gobierno regional y ser determinantes en la Junta.
Preguntado por si su entrada en el Ejecutivo castellano-manchego les puede haber pasado factura, ha dicho que este movimiento estuvo respaldado por el 85 por ciento de la militancia y ha resaltado que Podemos ha aportado "cosas muy buenas al Gobierno".
Del mismo modo, ha comentado que en las próximas jornadas analizarán con más detalle los resultados electorales, aunque ha vuelto a incidir en que la presencia en la pasada legislatura en el Gobierno autonómico no es una causa de la pérdida de apoyo en las urnas.
Ha aseverado que la campaña desplegada por Unidas Podemos "ha sido magnífica, la más imaginativa y la más creativa" y, al mismo tiempo, ha sido la única que, a su juicio, "ha puesto encima de la mesa algo distinto".
Por último, ha felicitado al PSOE por haber logrado una victoria "amplia y holgada" tanto en Castilla-La Mancha como en otras regiones.
