El presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, considera que la victoria del bloque de centro derecha en las elecciones de Castilla y León "abre la puertas" de un cambio político también en España o en Castilla-La Mancha y, sobre la posibilidad de que el PP pacte con Vox en la comunidad vecina, ha señalado que no es partidario de demonizar a ningún partido que esté dentro de la Constitución.
Núñez ha hecho declaraciones a los periodistas antes de asistir en Toledo al I Foro Económico Español ‘Castilla-La Mancha: Logros y Desafíos", en relación con las elecciones de Castilla y León, donde el PP ha conseguido 31 escaños, dos más de los que tenía pero lejos del objetivo de acercarse a la mayoría absoluta, por lo que dependerá de Vox para gobernar, ya que este partido ha conseguido 13 representantes; mientras que el PSOE, con 28 parlamentarios, no tiene posibilidades de sumar con otros partidos.
El presidente del PP castellano-manchego espera que el líder del PP de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, sea presidente "cuanto antes" y, sobre la necesidad de pactar con Vox para ello, ha recordado que el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, tiene un gobierno de coalición con Podemos, y el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, en su primera legislatura también hizo vicepresidente al secretario regional de Podemos,
Considera que "el buen funcionamiento de Madrid y de Castilla y León" abre sinergias positivas a Castilla-La Mancha, por lo que se ha mostrado satisfecho con la victoria de Fernández Mañueco, a quien ya tuvo la oportunidad de felicitar ayer personalmente tras ganar las elecciones.
Para Núñez, el "gran derrotado" ha sido el candidato socialista, Luis Tudanca, que se ha dejado 7 escaños, y que ha interpretado como un "castigo" a las políticas de Pedro Sánchez y los dirigentes territoriales del PSOE, además de que Ciudadanos, ha dicho, "prácticamente desaparece, después de desaparecer en Madrid".
Para el líder del PP de Castilla-La Mancha, la victoria del PP en Castilla y León supone un "cambio de ciclo" que "va a venir también a nivel nacional y a Castilla-La Mancha".
"Nos da más fuerza para seguir trabajando como lo estamos haciendo", ha destacado Núñez, para quien la victoria del bloque de centro derecha en la comunidad vecina supone que se" abren las puertas de un cambio político".
PROYECTO "SÓLIDO Y SERIO"
En otro orden, el presidente del PP de Castilla-La Mancha ha defendido que el Programa Estratégico para el Rescate de los Autónomos en el que está trabajando es un “proyecto sólido y serio” para que estos profesionales se conviertan en una pieza “importante y relevante” para el futuro de la Comunidad Autónoma.
Así lo ha indicado Núñez, tras mantener una reunión este lunes con el presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, y presidente de ATA Castilla-La Mancha, Miguel Ángel Rivero, donde ha ahondando en este proyecto de mejora para los autónomos castellanomanchegos.
El presidente del PP regional ha apostado por una baja fiscalidad para los autónomos, así como por el aumento de las ayudas directas al sector o por la extensión de la tarifa plana autonómica “más allá de la nacional”. Además, apostar por los autónomos que se instalen en el mundo rural y por los jóvenes, las mujeres y los mayores de 45 años.
“Se trata de un proyecto serio en el que estamos trabajando para que los autónomos sean relevantes e importantes en Castilla-La Mancha”, ha concluido.
LA LEY DE AGUAS ES UN "ENGAÑO"
Por otra parte, el PP de Castilla-La Mancha ha advertido este lunes de que el proyecto de Ley de Aguas que se debate este jueves en el pleno de las Cortes es un "engaño" y que solo pretende aumentar la presión fiscal a los ciudadanos.
Así lo ha señalado en una rueda de prensa la diputada regional del PP Ana Guarinos, quien ha incidido en que la normativa está "mal llamada" porque no es una Ley de Aguas ya que "no aporta agua, no garantiza ni una sola gota, no resuelve las carencias del agua en la región ni los problemas medioambientales", además de que ha reprochado que no responde a los acuerdos adoptados en la Mesa regional del Agua hace más de un año.
A su juicio, esta nueva Ley debería denominarse "de los tributos del agua" porque aumenta las dos tasas ya existentes, los cánones de aducción y depuración, y crea un nuevo impuesto al agua que el Gobierno regional llama canon medioambiental y que pagarán indiscriminadamente todos los castellanomanchegos, familias y empresas.
Para los 'populares', ha dicho Guarinos, el fin de la nueva norma es "volver a meter la mano en el bolsillo de todos los castellanomanchegos" y, por tanto, ha considerado que es "confiscatoria y recaudatoria exclusivamente", de manera que el Ejecutivo autonómico espera recaudar cerca de 70 millones de euros con la subida de los dos cánones existentes y el nuevo impuesto al agua.
Además, ha alertado de que se trata de una legislación "inoportuna" porque "Castilla-La Mancha es una de las regiones que soporta mayor presión fiscal" en un momento en el que "las economías están tocadas" por la pandemia de la covid-19 y ni las familias ni las empresas se han recuperado, y ha lamentado que la nueva factura del agua experimentará una subida entre el 25 y el 35 por ciento con respecto a la actual.
Guarinos ha recordado que el grupo popular ha presentado 41 enmiendas parciales al proyecto de Ley de Aguas de Castilla-La Mancha, sobre todo para que se elimine el nuevo impuesto, y que el PSOE no ha presentado ninguna, lo que a su modo de ver denota "la sumisión, el conformismo y el aplauso" de los socialistas a un Gobierno que va a volver a incrementar la presión fiscal.
