Los directores de la Policía Nacional, Francisco Pardo, y de la Guardia Civil, Félix Azón, se han comprometido este viernes a mejorar la coordinación entre los dos cuerpos y a trabajar con "transparencia y lealtad" en beneficio de la seguridad de todos los españoles.
Pardo y Azón han tomado posesión de sus cargos en el Ministerio del Interior, en un acto presidido por su titular, Fernando Grande-Marlaska, que ha reiterado el desafío de impulsar la coordinación entre ambas fuerzas de seguridad del Estado.
"Nuestro propósito es hacerlo lo mejor posible, mejorar todo lo que se pueda mejorar y no empeorar nada de lo que esté bien", ha defendido Marlaska tras elogiar las trayectorias de ambos y desearles "el mayor de los éxitos", porque estos serán los de todos los ciudadanos.
Por su parte, la secretaria de Estado de Seguridad, Ana Botella Gómez, ha trasladado el compromiso del nuevo equipo de Interior de de "extremar la dedicación" ante las amenazas a la seguridad internacionales de las que no es ajena España.
Un reto, ha dicho, que afrontarán Pardo y Azón "con transparencia, dedicación y ejemplaridad", sin olvidar el "sacrificio que va en la naturaleza del cargo".
Tras prometer su cargo, el nuevo director de la Guardia Civil ha reconocido que jamás hubiera soñado acceder a él; ha agradecido tanto a Marlaska como a la ministra de Defensa, Margarita Robles, su propuesta; y ha dejado claro que "primero será la ley y luego la Guardia Civil, porque yo soy el último".
Azón ha manifestado su voluntad de colaborar con la Policía Nacional, algo que será recíproco, según ha asegurado Pardo, quien se ha dirigido a los generales de la Guardia Civil presentes en el acto para invitarles a "caminar siempre juntos".
Y ha enfatizad: "Me dejaré la piel y haré el esfuerzo necesario para conseguir una policía más profesional, eficaz, moderna y coordinada con la Guardia Civil con otras fuerzas seguridad".
