El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado este viernes una inversión de 120 millones de euros para medidas extraordinarias de cara al inicio del curso escolar, para el que se han diseñado tres escenarios ante posibles brotes de COVID-19, que van desde la presencialidad total hasta la posibilidad de cierre de centros educativos.
Esta inversión se ha aprobado en una reunión extraordinaria del Consejo de Gobierno y, entre otras partidas, reserva 28 millones de euros para un plan de digitalización de la educación, que contempla la adquisición de 72.000 dispositivos informáticos, y una nueva plataforma digital que educación, que sustituya la actual "Papas2.0", tal y como ha detallado el presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page.
Por su parte, la consejera de Educación, Rosa Ana Rodríguez, ha detallado los tres escenarios que su departamento ha diseñado de cara al inicio del curso escolar, de forma que el denominado "escenario 1", que supone la presencialidad total, con medidas organizativas y sanitarias; el "escenario 2" que conllevaría la semipresencialidad cuando existiera un riesgo de transmisión comunitaria, siempre dictaminado por Salud Pública, y el "escenario 3", que podría suponer el cierre de centros educativos y la teleformación.
Entre las medidas establecidas en el "escenario 1", la Junta de Comunidades ha aprobado la creación de grupos de convivencia estable, preferentemente en las cursos de infantil y 1º y 2º de Primaria, para mantener entornos más seguros y crear "un anillo de seguridad", y se ha solicitado a los centros que se sectoricen los espacios, por edificios o secciones independientes, para que, en el caso de que se produjese algún caso de COVID-19, pudiera ser rastreado con mayor facilidad.
Además, para poder acomodar los centros de educativos, se ha aprobado el Plan Extraordinario de obra RAM, que contará con 557 actuaciones en la región, de las que también se beneficiarán los centros de educación especial.
Por otra parte, se ha previsto el reparto de más de 1 millón de mascarillas a los centros educativos y a la Universidad, del que se beneficiarán más de medio millón de personas; una dotación extraordinaria a los centros educativos para implementar las medidas sanitarias e higiénicas, un plan de refuerzo de equipos de prevención de riesgos laborales y se realizarán pruebas de diagnóstico a todo el personal docente y no docente.
Igualmente, para este primer escenario, el Gobierno de Castilla-La Mancha prevé incrementar las becas de materiales curriculares y de comedor, de las que podrán beneficiarse más de 94.300 alumnos de la región.
Dentro de las medidas aprobadas en los "escenarios 2 y 3", se encuentran el Plan de Digitalización de Castilla-La Mancha, que supondrá poner a disposición de los centros educativos 72.000 dispositivos informáticos, de los cuales 45.000 serán portátiles, cerca de 14.500 tabletas, 10.000 routers, 2.000 webcam y 360 paneles interactivos.
Así mismo, se ha aprobado la creación de nueva plataforma digital que disponga de un espacio colaborativo para mejorar la comunicación entre las familias y el profesorado, y dar respuesta así a la demanda que los docentes venían solicitando anteriormente como ha asegurado la consejera de Educación, Rosa Ana Rodríguez.
"Vamos a poner en marcha también una Plataforma digital segura e inclusiva, que contiene un entorno virtual y otro colaborativo, para que se pueda desarrollar la educación de una forma virtual”, ha subrayado Rodríguez, que ha añadido que "a todo esto, se sumará un plan de formación del profesorado, destinado a que los docentes mejoren sus competencias en el uso de estas nuevas tecnologías", ha añadido.
También se ha aprobado la contratación de más de 3.000 docentes, a partir de septiembre, para reforzar las plantillas y generar un redistribución del alumnado en grupos menos numerosos, y así como la puesta en marcha, por tercer año consecutivo, del Plan de Éxito Educativo y Prevención del Abandono Temprano, del que se beneficiarán más de 113.000 alumnos.
La consejera de Educación, Cultura y Deportes ha explicado que este plan se desarrollará en dos fases, la primera durante el primer trimestre, con un programa de refuerzo para el que se contratarán 800 nuevos docentes, y la segunda, que comenzará en enero, y en la que se contratarán otros 160 efectivos, y ha asegurado que esperan que estas medidas "ayuden a compensar el curso anterior más desequilibrado".
Además, el presidente de Castilla-La Mancha ha anunciado la puesta en marcha una Línea 900 para resolver las dudas que puedan tener los equipos directivos o los docentes en general sobre los aspectos relacionados con la COVID-19 en el ámbito educativo.
Y a esta medida, se sumará la contratación de un equipo de 10 técnicos en prevención de riesgos laborales para las tareas de asesoramiento a los centros en la elaboración y puesta en marcha de los planes de contingencia y sobre las distintas incidencias que puedan surgir.
Por su parte, el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, ha explicado que a partir del 29 de julio y durante todo el mes de agosto, el Gobierno de Castilla-la Mancha realizará un cribado serológico a los profesionales de Educación, para que el curso educativo comience "con la máxima seguridad".
Fernández Sanz ha indicado que la prueba consistirá en un pinchazo en el dedo a través del cual se conocerán dos parámetros, si el profesional ha tenido la enfermedad y si el profesional la tiene en curso o la ha tenido recientemente.
Estas pruebas se realizarán en ocho centros hospitalarios de la región, el Hospital de Albacete, el Hospital de Cuenca, el Hospital de Ciudad Real, el Hospital Mancha Centro, el Hospital de Puertollano, el Hospital de Guadalajara, el Hospital de Toledo y el Hospital de Talavera de la Reina.
Con todo, Fernández Sanz ha incidido en que "lo más importante de cara al inicio del curso escolar es el uso de la mascarilla, como homenaje a la ciudadanía" y también ha subrayado la importancia del lavado de manos y la toma de temperatura a la entrada de los centros, "ya que se ha comprobado que uno de los síntomas que más ha prevalecido en Castilla-la Mancha por el coronavirus ha sido la fiebre".
