El Congreso deberá decidir si crea nuevas Comisiones para adaptarse al nuevo Gobierno

Aumentar las comisiones parlamentarias conlleva más gastos en complementos para presidentes, vicepresidentes, secretarios y personal de la Cámara

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El Congreso de los Diputados deberá decidir en los próximos días si crea dos o tres nuevas comisiones parlamentarias para adaptarse a la nueva estructura ministerial del Gobierno de Pedro Sánchez, que ahora cuenta con 17 ministerios, cuatro más que el Ejecutivo anterior.

Actualmente, la Cámara Baja dispone de 19 comisiones permanentes legislativas, de las que catorce responden estrictamente a la configuración del Ejecutivo saliente de Mariano Rajoy. El resto, seis, son las de Cultura, Cooperación Internacional, Igualdad, Estudio del Cambio Climático y Políticas Integrales de la Discapacidad.

Una vez conocida la distribución competencial del nuevo Gobierno socialista, la Junta de Portavoces del Congreso deberá decidir cómo adapta los nuevos ministerios en el actual esqueleto de comisiones de la Cámara Baja.

En concreto, los grupos parlamentarios deberán evaluar la conveniencia o no de crear dos comisiones nuevas para acoger las iniciativas relativas a los Ministerios de Ciencia y de Política Territorial, que ahora no tienen su reflejo en el Palacio de la Carrera de San Jerónimo.

Tampoco cuenta con comisión parlamentaria el nuevo Ministerio de Transición Ecológica, cuyas políticas están divididas en la actualidad entre las comisiones de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente; de Energía, Turismo y Agenda Digital; y la dedicada al Estudio de Cambio Climático.

CAMBIAR DENOMINACIONES Y AJUSTAR COMPETENCIAS

Asimismo, el Congreso podría decidir modificar la denominación del resto de comisiones parlamentarias o reajustarlas, según sea el caso, a la división de competencias de cada uno de los Ministerios decidida por Sánchez.

Por ejemplo, en la actualidad la Función Pública va hermanada con Hacienda y en el nuevo Gobierno va con la Política Territorial; el Deporte va unido a Educación en el Congreso, mientras que ahora Sánchez lo ha vinculado con la Cultura.

Lo mismo podría ocurrir con la vigente Comisión de Economía, Industria y Competitividad, teniendo en cuenta que el Ejecutivo socialista recién constituido tiene ambas políticas separadas en dos carteras diferentes.

REFORMA DEL REGLAMENTO

En el caso de que el Congreso decidiese remodelar el número y la denominación de sus comisiones parlamentarias, los grupos deberán presentar una proposición de ley de reforma del artículo 46 del Reglamento del Congreso para su tramitación en lectura única y votación en el Pleno.

Eso sí, aumentar el número de comisiones podría conllevar un aumento del gasto, ya que habría que crear sus correspondientes mesas con sus respectivos presidente, vicepresidentes y secretarios (uno, dos y dos).

Según el Régimen Económico y Ayudas de los Señores Diputados, los presidentes de comisión reciben un complemento mensual de 1.431,31 euros por gastos de representación; los vicepresidentes, 1.046,48 euros; y los secrtarios, 697,65 euros.

Junto a los miembros de las mesas de cada comisión, los grupos parlamentarios eligen también a un portavoz y un portavoz adjunto para cada uno de estos órganos. Los portavoces reciben un complemento de 1.046,48 euros mensuales y los portavoces adjuntos, de 697,65 euros. Eso sí, los complementos no son compatibles entre si y sólo se puede cobrar por una comisión.

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