El grupo parlamentario de Ciudadanos (Cs) llevará este jueves al pleno de las Cortes de Castilla-La Mancha un debate general sobre los Presupuestos Generales del Estado (PGE) y el acuerdo del Gobierno de coalición con Bildu y ERC para aprobarlos, con el objetivo de que el presidente regional, Emiliano García-Page, diga "de qué lado está".
Así lo ha señalado la portavoz de la formación naranja en el Parlamento autonómico, Carmen Picazo, en una rueda de prensa telemática en la que ha lamentado la "deriva moral" del PSOE y ha asegurado que, a pesar de las diferencias, Cs nunca llegó a pensar que pudiera buscar a Bildu como "socio estratégico en la dirección económica de España" y ha considerado que tampoco lo pensaban los votantes y militantes socialistas.
Sin embargo, ha defendido que mientras el PP y Vox "se quedan sin hacer nada para evitarlo", la líder nacional de Cs, Inés Arrimadas, ha ofrecido una alternativa al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para que los presupuestos estatales "no estén en manos de Otegi y Rufián" y ha actuado "con responsabilidad" para que no sean necesarios los votos de partidos "independentistas y radicales" y sobre todo de "quienes no condenan el terrorismo de ETA".
Para Cs, ha resaltado, es una "inmoralidad" pactar los presupuestos con "los herederos de una banda terrorista" y Picazo ha remarcado en este sentido que "hay que decir alto y claro que es una auténtica vergüenza".
Por ello, ha pedido a García-Page "un gesto firme más allá de las palabras" y que se pronuncie en las Cortes regionales y no en los medios de comunicación, así como que el PSOE deje de echar "balones fuera" y no quiera hablar sobre este asunto porque sea un tema estatal y no de competencia regional.
A este respecto, Picazo ha alertado de que unos presupuestos nacionales "condicionados por los partidos separatistas pueden ser letales para Castilla-La Mancha", al tiempo que ha recordado que después de décadas de pactos del PSOE y del PP con gobiernos nacionalistas, se ha generado una "brecha entre regiones" que ha "condenado" a esta comunidad autónoma a infraestructuras "de segunda y hasta de tercera".
Por lo tanto, ha abogado por unos PGE "sensatos, moderados y orientados a las necesidades de familias, autónomos y clase trabajadora" y que tengan "el visto bueno de Europa" para que puedan llevarse a cabo las reformas que Castilla-La Mancha necesita.
