El secretario de Política de Podemos en Castilla-La Mancha, Francis Gil, ha hablado sobre la reforma del Estatuto que previsiblemente se abordará a lo largo de esta legislatura en la Comunidad Autónoma, abogando por poner en marcha un debate regional "de verdad, no falsificado" para llevarla a cabo de la mano de toda la sociedad.
En una entrevista con Europa Press, Gil ha indicado además que entre las exigencias de Podemos para apoyar esta reforma estatutaria estarán la garantía de una educación y sanidad públicas, además de blindar el derecho a la vivienda para evitar desahucios y establecer una renta mínima garantizada.
En este sentido, ha dicho que "no puede haber nadie que pierda su casa por una mala racha económica". "La política no puede ir por detrás de la gente. No se puede echar a la gente por no poder pagar a un banco", ha aseverado.
Todas estas exigencias, a su juicio, son "más que viables económicamente", ya que en Podemos tienen "análisis que permiten decir que no es una cuestión de dinero" además de que se podrían lograr estos aspectos "sin aumentar el gasto, sólo con hacer un presupuesto más equilibrado".
El debate regional al que Podemos quiere someter esta reforma puede hacerse a través de "dos articuladores que vertebran la región, como son la Universidad de Castilla-La Mancha y la Radio y Televisión públicas".
"Hay que abrir este debate. Queremos ser una región, y hasta ahora somos sólo un archipiélago de provincias con sus comarcas. Por eso es necesario un consenso de mínimos entre toda la sociedad para poder decir que Castilla-la Mancha significa algo y para conseguir un orgullo de pertenencia", ha subrayado.
Gil desea además que el nuevo Estatuto pueda delimitar una mayor autonomía fiscal, asegurando que todas las autonomías pueden sentarse a comer en la misma mesa, pero en este caso Castilla-La Mancha "está en la mesa de los niños".
EL PRESUPUESTO, CON UNA "ORDENACIÓN" DE IMPUESTOS
Francis Gil se ha referido también a la ley de presupuestos generales de la Comunidad Autónoma para el próximo año, indicando que tras las elecciones podría estar listo el borrador del techo de gasto. Tras haber tenido unos "primeros contactos" con el Gobierno regional, Gil puede avanzar que no habrá una subida de impuestos sino una "ordenación" de los mismos.
Según ha considerado, actualmente la mayor carga impositiva "la tiene quien tiene una nómina y siempre pagan los mismos", por lo que ha abogado por luchar contra el fraude y contra la economía sumergida.
Ha excusado el retraso en la presentación de las cuentas por parte del Ejecutivo regional en el hecho de que "el cambio de Gobierno fue accidentado", aunque ha desmentido al presidente autonómico, Emiliano García-Page, asegurando que "no están tan avanzados como dice".
"Debería ser más precavido, es muy optimista al decir eso. Creo que tiene un problema, y es que va por delante de lo que pasa", ha dicho Gil, quien ha advertido que para que las cuentas tengan el apoyo de los dos diputados de Podemos en las Cortes para ser aprobadas, la línea roja son los 500 millones de euros del Plan de Rescate Ciudadano reflejado en el pacto de investidura.
EL ACUERDO DE INVESTIDURA, AL 50%
Se ha referido también al acuerdo de investidura por el cual Podemos otorgó su apoyo en las Cortes a la Presidencia de García-Page, subrayando que se ha cumplido hasta ahora al 50 por ciento pero avisando de que en el mes de noviembre "ha habido mucho vencimiento de letras".
"No estamos satisfechos nunca, porque la insatisfacción va en nuestro ADN. Son muy lentos en algunas cosas, no por falta de voluntad, sino por falta de capacidad del Gobierno", ha lamentado Francis Gil, quien cree que el Ejecutivo autonómico "está empezando a acomodarse".
Ha agregado por último que al PSOE de la región "le cuesta actualizarse". "Tienen un software que funciona con dificultades, pero un hardware tan viejo que cuando quiere actualizarse tiene problemas", ha enfatizado.
