Un artículo de Gema Huesca publicado en exclusiva por Vozpópuli
José Manuel Villarejo presumió durante muchos años de sus vínculos con el PP de Mariano Rajoy y de sus maniobras para beneficiarle en frentes judiciales como Gürtel o el espionaje a Luis Bárcenas. Sin embargo, sus contactos con la esfera del partido iban más allá de sus caras visibles, según confesó al exjefe de la UDEF, José Luis Olivera, en una charla mantenida hace 13 años. El comisario puso ya en escena a Ignacio López del Hierro. Del marido de Cospedal, que tiempo después se convertiría en pieza clave del caso Kitchen, dijo que era su amigo y que llevaban "30 años" haciendo "maldades".
"La línea directa que tengo con él es que es un tío que desde hace 30 años hago maldades con él. Por lo tanto, no tengo que demostrar nada", explica Villarejo a su interlocutor. En esta conversación, que se prolonga más de cuatro horas y a la que ha tenido acceso Vozpópuli, ambos despachan sobre la situación en la formación popular cuando ejercía la oposición al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
Aunque años después Ignacio López del Hierro apareció muy ligado al espionaje a Luis Bárcenas, llegando a figurar como imputado en el caso Villarejo, en aquel momento estaba a la sombra de su pareja. El agente encubierto lo sitúa en la conversación cuando alude a una reunión de María Dolores de Cospedal con el entonces presidente del PP, Mariano Rajoy. En concreto, es José Luis Olivera el que pone el foco en la cúpula de la formación popular: "Tuvieron una reunión con 'la Cospe', Rajoy..:", dice el exjefe de la UDEF.
"Me lo cuenta 'la Cospe' ayer"
Villarejo recoge el guante y responde: "Me lo cuenta 'la Cospe' ayer... Ellos normalmente quedan en el Ritz o en el Palace. Cuando terminan el marido va y la recoge. Se llama Ignacio López del Hierro", dice y continúa: "Este tipo era el segundo de Metrovacesa, y ahora es el segundo de la francesa que se desgaja de Metrovacesa (Gecina). Cuando los Sanahuja se van por un lado y Del Rivero por otro", explica.
El comisario sigue explicándole su pasado como gobernador civil. Le define como un "guaperas" de la misma edad que ellos pero que "se cuida muy bien". El entonces jefe de la Policía que dirigía pesquisas claves para el PP como la trama Gürtel se interesa sobre él. "¿Es economista?", pregunta a Villarejo- Éste asiente: "Creo que es economista, muy preparado siempre, muy listo. Vividor, pepero de estos guaperas, un día si quieres te lo presento", apostilla.
El agente encubierto continua la declaración contándole que es "muy amigo" suyo y que había "hecho maldades". Además, le advierte de cara al futuro, a sabiendas de que el empresario ya movía hilos en la sombra para tener información privilegiada de las causas de corrupción que afectaban al Partido Popular. "Que sepas que este es un tío muy maqueado, cincuenta... indefinidos y ha vivido siempre en UCD, PP... Siempre. Entonces coge a la Cospe, le da un puntazo, se queda embarazada y a partir de ahí la aúpa", explica.
Los chivatazos de Villarejo
Aunque Villarejo alardeaba ya de su buena relación en 2009, habría que esperar años después para ubicar a López del Hierro como pieza clave y a la sombra en el partido. El empresario se aprovechó de su cercanía con Villarejo para obtener chivatazos de cómo iban a discurrir investigaciones que afectaban al PP como la operación Brugal en Alicante o la trama Gürtel. Años después, ya en 2013, volvió a tener papel protagonista en la bautizada como la trama Kitchen.
Villarejo ha defendido en varias ocasiones que en este caso medió para que captaran como confidente policial a Sergio Ríos Esgueva, entonces chófer de Bárcenas. En aquel momento el extesorero se había convertido en enemigo número 1 del PP y el nombre de López del Hierro ya era más que conocido en la policía patriótica que dirigió Eugenio Pino.
El comisario -que se refería a él con el nombre de 'El Pollas'- grabó conversaciones y reflejó en sus cuadernos personales numerosas anotaciones sobre él y Cospedal en pleno espionaje a Luis Bárcenas para quitarle información clave que atesoraba de la Gürtel. Estos indicios llevaron al magistrado Manuel García Castellón a imputarle en junio del año pasado por delitos de cohecho, malversación y tráfico de influencias en relación a este operativo contra el extesorero del PP que se dirigió desde el Ministerio del Interior.
"Él se queda de retrancas"
El juez que dirige la macrocausa de espionajes del comisario jubilado consideró que había indicios más que suficientes para citarle como investigado junto con la exsecretaria general del partido y también José Luis Ortiz, exjefe de gabinete de esta última. En su comparecencia ante el juez reconoció que habló de la trama Gürtel con Villarejo pero negó cualquier irregularidad. Este mismo diario informaba el miércoles de que el comisario y Olivera controlaron en primera persona el avance en los juzgados de esta causa sobre la caja B en el PP prácticamente dese sus inicios.
