Opinión

Para Elena

La noticia nos dejó a todos los trabajadores de la Junta impactados.

¡Imposible asumir el fallecimiento de la Consejera más joven del Gobierno de Castilla-La Mancha!

Pero la muerte nada sabe, ni quiere, de edades ni de tiempo vivido. Tiene sus propias reglas y, para dejar claro que no respeta eso que nosotros llamamos orden natural de la existencia, de vez en cuando da un puñetazo sobre la mesa y adelanta el turno de alguien a quien aún le quedaba mucho por hacer y vivir.

La muerte de los jóvenes es un naufragio.

¡Qué injusta, qué maldita, qué cabrona, la muerte que no nos mata a nosotros sino a los que amamos!

El dolor se vuelve insoportable y la tristeza infinita

Para familia y amigos, los que se quedan (por ella, por ellos), un poema de Francisco Álvarez Hidalgo:

No te enraíces en el desconsuelo,
que es amarga la savia producida,
y arrancará el encanto de la vida
dejando en tu alma un témpano de hielo.

Ni proclames tu luto bajo el velo
de triste soledad por su partida,
debes cicatrizar pronto la herida, 
que ella vive en otro mundo u otro cielo.

Si partir es morir en cierto modo,
la muerte es solamente lejanía,
y quien muere, no muere, va primero.

Y aunque al final has de encontrarlo todo,
ahora debes marchar en compañía,
sonrisa abierta y ánimo ligero
”.

Ayer murió Elena de la Cruz Martín.

Se detuvo abril.

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