Un estudiante de Valdepeñas y una de Albacete logran la nota más alta en la PAEG

Un estudiante de Valdepeñas (Ciudad Real) y una de Albacete han obtenido la nota más alta en la región en las Pruebas de Acceso a Enseñanzas Universitarias Oficiales de Grado (PAEG) -antigua Selectividad-, al lograr un 9,925.

La Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) ha informado a Efe de que también en la segunda calificación más alta ha habido empate, en este caso triple, ya que un chico de Toledo, otro de Talavera de la Reina y uno más de La Guardia han obtenido un 9,9 en sus exámenes.

Javier Guzmán Muñoz es el chico de La Guardia que ha logrado la segunda mejor nota en Castilla-La Mancha, unos resultados que ha obtenido, según explica a Efe, con trabajo diario y con un esfuerzo adicional las últimas semanas.

Javier, que admite que afrontó los exámenes -precisamente los últimos que se hacen de la PAEG- con nervios, explica que desde que entró en el instituto ha sacado buenas notas, "de sobresaliente".

La clave de sus buenos resultados radica, según explica, en que hace las tareas todos los días y repasa lo explicado en clase, mientras que los exámenes los prepara con días de antelación: "tres o cuatro días antes si solo tengo uno ese día, o con más tiempo si en un mismo día se acumulan varios exámenes".

Para las asignaturas de ciencias, -sus favoritas, como matemáticas, física o dibujo técnico-, Javier recomienda hacer ejercicios y "practicar mucho", mientras que para las materias "de letras", como historia o literatura, su táctica es "repetir en voz alta y explicarlo".

Con esta rutina a lo largo del curso y con un esfuerzo extra, estudiando desde las 8.00 hasta las 20.00 horas la última semana, Javier ha logrado un 9,9 sobre 10, una calificación con la que cree que no tendrá problemas para poder estudiar lo que desea, un doble grado de Ingeniería Informática y Matemáticas en la Universidad Complutense de Madrid.

Además, afirma que desea estudiar un curso o dos en el extranjero, en el Reino Unido o en Estados Unidos, para mejorar su inglés, pues aunque ya tiene el certificado de B2, se muestra consciente de que el manejo de ese idioma es fundamental en el mundo la informática.

Javier señala que no tiene decidido qué salida profesional tomará cuando acabe sus estudios, sino que ha elegido el doble grado porque le gustan los contenidos que va a estudiar.

"Las matemáticas tienen un montón de salidas laborales y la informática igual, puedes trabajar de un montón de cosas", destaca Javier, que prefiere primero pensar en sus estudios y después, elegir un trabajo acorde a su formación, como programador.

Pero antes, disfrutará del verano y de las vacaciones, para descansar del esfuerzo de todo el curso y para empezar el próximo curso escolar -su primer año universitario- con "las mismas ganas de cada año".

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