El Salón de Actos del Hospital Universitario de Guadalajara acoge hoy la celebración de la VIII Jornada de Cirugía Hepatobiliopancreática, a la que asisten cerca de 160 profesionales de toda España y que, en la presente edición, se centra en el hepatocarcinoma.
En la inauguración, el gerente del Área Integrada de Salud de Guadalajara, Lucio Cabrerizo, ha felicitado al director de la jornada, el jefe de Cirugía General y del Aparato Digestivo del hospital, José Manuel Ramia, y a todo su servicio por la organización, año tras año, de estas jornadas, que demuestran "un excelente nivel científico y una elevada participación tanto de ponentes como de asistentes", ha informado el Sescam.
Por su parte, la directora provincial de Sanidad, Margarita Gascueña, ha subrayado la importancia de este tipo de jornadas para "compartir experiencias, dudas e informarse sobre estudios e investigaciones", y "sacar adelante a pacientes con un diagnóstico muy difícil y un pronóstico dudoso".
Durante la jornada se han desarrollado distintas ponencias en las que han abordado aspectos como el síndrome metabólico, novedades radiológicas, cirugía laparoscópica o trasplante hepático y hepatocarcinoma, entre otros asuntos.
Para ello, se ha contado con la intervención de los doctores Miguel Casares, Mario Serradilla, Emilio Ramos, Fernando Rotellar, Miguel Ángel Gómez Bravo, Fernando Pardo y Ana Matilla, mientras que los doctores Alejandro Serrablo, Emilio de Vicente, José María Jover y Antonio Torres han moderado las distintas mesas redondas, que se han desarrollado en torno al tratamiento del hepatocarcinoma y la discusión de vídeos y casos clínicos.
El hepatocarcinoma es el tumor de hígado más frecuente, representa en torno al 80 ó 90 por ciento de los tumores hepáticos malignos primarios y se presenta con mayor frecuencia en los hombres, principalmente entre los 50 y 60 años.
Su incidencia se sitúa en alrededor de 11 casos por cada 100.000 habitantes y sus causas se relacionan con infección por el virus de la hepatitis B y C, alcoholismo y hemocromatosis.
El pronóstico del cáncer de hígado depende de su estadio, del daño en la función hepática y de la presencia o no de cirrosis hepática.
La tasa de supervivencia sin tratamiento al año es del 29 %, del 18 % a los dos años y del 8 por ciento a los tres años, si bien cuando se puede realizar una cirugía completa en un estadio inicial, la supervivencia a los cinco años del diagnóstico se eleva por encima del 50 por ciento.
En los últimos años, la introducción de la ecografía y los avances en las técnicas han permitido el diagnóstico de este tipo de tumor en un estadio más inicial que permite un mejor pronóstico.
