Desde hace varios días cuelga del balcón del Ayuntamiento de Albalate de Zorita (Guadalajara), junto a sus banderas institucionales, una pancarta que resume en cuatro en palabras y una cifra el "malestar" que ha llevado al consistorio a hacer público este mensaje para que todos sus vecinos sean conocedores de ello: “La Junta nos debe 771.798 euros”. Una deuda económica, reconocida por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, que se remonta a 2009 y que al estar todavía pendiente "está haciendo muy difícil la gestión diaria de esta localidad alcarreña".
Tras varias solicitudes formales por parte del Ayuntamiento dirigidas a la Consejería de Presidencia y de Administraciones Públicas para hablar, en primer lugar con el Director General de Administración Local, y luego en vista de su no respuesta, directamente con el Consejero, la alcaldesa de esta localidad, Covadonga Pastrana, reconoce que no entiende esta actitud cuando son varios los problemas que afectan al municipio y no es que todavía no hayan sido solucionados, sino que directamente, aun solicitando la primera cita desde ya el pasado mes de abril, no se ha producido ninguna respuesta por parte de la Administración Regional, ha informado el Consistorio en nota de prensa.
Según Pastrana, “es inadmisible que sabiendo que se trata de un tema tan importante para una localidad de su Comunidad Autónoma la única respuesta por parte de la Consejería sea durante este año el silencio más absoluto. Y sobre todo teniendo en cuenta que en el año 2013 el Director General de Administración Local no tuvo inconveniente en mantener una reunión conmigo y la primera teniente de alcalde del consistorio. Sin duda éstas no son las formas más correctas de abordar un problema que ya lleva pendiente cinco años”. De hecho ante esta reiterada "callada por respuesta", Covadonga Pastrana se llega incluso a plantear si es que no se recibe a la alcaldesa de Albalate "por problemas de agenda, o es que la agenda está directamente cerrada para los municipios gobernados por el PSOE".
El Consisotorio destaca que a pesar de la crisis económica, que también está repercutiendo seriamente a esta localidad alcarreña, y del dinero que la Junta le adeuda, el Ayuntamiento ha seguido manteniendo abiertos servicios como la biblioteca municipal, la vivienda tutelada de mayores, el servicio de ayuda a domicilio o el centro de atención a la infancia (CAI), "pese a que éstos no sean competencia directa del consistorio municipal".
