Toledo acogerá el Congreso de la Empresa Familiar con el Rey, Rajoy y Sánchez

El director general del Instituto de la Empresa Familiar, Juan Corona (i), y el presidente de la Asociación de la Empresa Familiar de Castilla-La Mancha, Aurelio Vázquez (c), durante la presentación del XX Congreso Nacional de la Empresa Familia - EFE/Ismael Herrero
photo_camera El director general del Instituto de la Empresa Familiar, Juan Corona (i), y el presidente de la Asociación de la Empresa Familiar de Castilla-La Mancha, Aurelio Vázquez (c), durante la presentación del XX Congreso Nacional de la Empresa Familia -

La ciudad de Toledo acogerá del 1 al 3 de octubre el XX Congreso Nacional de la Empresa Familiar, en el que se darán cita más de medio millar de empresarios y que contará, previsiblemente, con la asistencia del rey Felipe VI, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el líder del PSOE, Pedro Sánchez.

El director general del Instituto de la Empresa Familiar (IEF), Juan Corona; el presidente de la Asociación de la Empresa Familiar de Castilla-La Mancha, Aurelio Vázquez, y su vicepresidente, Juan Ignacia de Mesa, han presentado este martes en rueda de prensa el programa.

El congreso, que se iniciará el mismo día del referéndum del 1 de octubre, suspendido por el Tribunal Constitucional, tendrá lugar en el Palacio de Congresos de Toledo bajo el lema "Celebrando la historia. Creando futuro", ya que coincide con el 25 aniversario del nacimiento del instituto, fundado en el año 1992.

"Hemos diseñado un congreso de máximo interés, es la reunión empresarial de estas características más importante que se hace anualmente en España y en Europa", ha aseverado Corona, quien ha destacado que también participará el humorista Carlos Latre.

El coctel de bienvenida tendrá lugar el domingo 1 de octubre en la Catedral Primada y contará con la presencia del arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez; la alcaldesa, Milagros Tolón, y el presidente de la Asociación de la Empresa Familiar de Castilla-La Mancha.

Al día siguiente, se celebrará la primera jornada de la cita en el Palacio de Congresos de Toledo, con la conferencia "Innovación para un futuro humano", a cargo de la presidenta de la Fundación Cotec, Cristina Garmendia.

A continuación, tendrá lugar la inauguración oficial bajo la presidencia del Rey, en la que está previsto que intervengan el presidente autonómico, Emiliano García-Page; el presidente de KPMG en España, Hilario Albarracín; el country head de Santander España, Rami Aboukhair, y el presidente del IEF, Ignacio Osborne.

La jornada continuará con el diálogo entre el presidente de Starbucks, Howard Schultz, y el presidente del Grupo Vips, Plácido Arango.

El segundo diálogo empresarial, que cerrará la primera jornada del congreso, será protagonizado por el presidente de Pernod Ricard, Alexandre Ricard, y el presidente del IEF.

El martes 3 de octubre está previsto que abra la segunda jornada el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y, a continuación, el director general del IEF presentará un avance de las líneas maestras del estudio "Formación, talento y empleo", que actualmente elabora el instituto y que se editará en "enero-febrero".

Tras esta intervención, tendrá lugar la mesa redonda "La empresa familiar: un compromiso con el crecimiento" en la que intervendrán la vicepresidenta del Grupo Antolin, Marie-Hélène Antolín; la vicepresidenta de Joyería Tous, Rosa Tous, y el consejero delegado de Delaviuda Confectionery Group, Manuel López Donaire, moderados por la periodista Isabel San Sebastián.

La clausura del XX Congreso Nacional de la Empresa Familiar contará con la presencia del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, acompañado del presidente del IEF.

"Ha hecho falta recorrer un largo camino para llegar al día de hoy, hace muchos años se tomó como objetivo traer el congreso a Toledo", ha desvelado el presidente regional de la Asociación de la Empresa Familiar.

Por su parte, De Mesa ha aseverado que es "muy positivo para Toledo este congreso", que ha calificado de "excelencia", y ha deseado que tenga "la repercusión que se merece", pese a coincidir con el 1-O.

En el caso de Castilla-La Mancha, el 94,3 por ciento de las empresas son de tipo familiar y éstas generan el 74,5 de la producción del sector privado, mientras que son responsables del 85,5 por ciento del empleo.

ANTE EL REFERÉNDUM CATALÁN

En otro orden de asuntos, el presidente de la Asociación de la Empresa Familiar de Castilla-La Mancha ha avisado respecto al referéndum independentista del 1-O en Cataluña que "se está planteando una cuestión muy grave desde el punto de vista empresarial" y ha subrayado: "Todos juntos sumamos más".

Vázquez ha rechazado ir "cada uno" por su cuenta y, con ello, ha mostrado su deseo de que "se cumpla plenamente la legalidad y la responsabilidad de cada una de las partes".

Además, ha puesto como ejemplo la historia de Toledo, "claro ejemplo de la convivencia de las tres culturas" y ha lamentado que no se aprenda "de la historia".

Por su parte, el presidente del IEF ha dicho que no cuentan con ningún estudio sobre las consecuencias de una supuesta independencia de Cataluña, si bien ha apuntado que la institución se fundó en Barcelona en 1992 y desde 1995 tienen doble sede, también en Madrid.

"El PIB catalán es una parte muy sustancial del PIB español", ha aseverado Corona, quien ha defendido que trabajan "en clave española" y, con ello, su objetivo indirecto es "el bien de España".

Por otra parte, ha destacado que España ya ha salido de la crisis económica y ha afirmado que se podría "llegar en un plazo muy breve de tiempo" a las cifras del año 2007, ya que "las previsiones de crecimiento se revisan al alza".

Con ello, ha admitido que "son muchas las voces" que piden revisar los salarios, pero ha apostado por vincular su evolución "a la productividad".

"Tenemos un problema de productividad terrorífico, las grandes crisis se plantean porque crece mucho el PIB y no crece la productividad", ha advertido y, con ello, ha admitido que le "da miedo que hora que las cosas van bien" se vuelvan a "tener tentaciones de crear burbuja".

"Espero y deseo que lo ocurrido del 2008 al 2013 sirva para que la gente tenga memoria y no vuelva a pasar, pero no pondría la mano en el fuego", ha afirmado Corona, quien ha lamentado que España no genere su propia tecnología y tenga que comprarla al exterior, "gastándose el dinero del superávit de la balanza de pagos".

En este sentido, ha reflexionado: "Si nos pareciéramos un poquito a los alemanes, las cosas irían mucho mejor seguro", ha concluido.

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