La Fundación Antonio Pérez de Cuenca ha abierto sus puertas a la obra pictórica del artista argentino Luis Frangella con la exposición titulada 'La pintura de Luis Frangella y el juego de la vida', que se inaugura este miércoles, 16 de diciembre, a las 19.00 horas, y permanecerá instalada hasta el próximo 31 de enero de 2016.
De este modo, se revisa la obra de este artista, fallecido en 1990, con una serie de cuadros de su trayectoria que dan cuenta de las principales temáticas que le obsesionaron como son la finitud, el semblante, el paso del tiempo, la generación del objeto tridimensional, la realidad de lo traumático y el anhelo del placer como horizonte de esperanza, según ha informado la Diputación de Cuenca en nota de prensa.
Se trata de un artista con reconocimiento en la escena artística de Nueva York, donde vivió desde 1976 hasta su muerte; y de Madrid, donde exhibía regularmente su obra en galería Buades.
Formó parte del núcleo de artistas del East Village neoyorquino. Se formó de arquitecto en la UBA de Buenos Aires. Entre otros logros, ganó el primer premio en el concurso para realizar el proyecto de la embajada argentina en Asunción y en Brasilia, en los que participó con Clorindo Testa y Francisco Bullrich.
Gracias a una beca del Massachusetts Institute of Technology llevó a cabo trabajos de investigación en el Centro de Estudios Visuales Avanzados, entre 1973 y 1976. Producto de estas investigaciones, realiza una serie de obras de laboratorio basadas en el estudio de la percepción donde las líneas de los objetos son trazadas con colores alternativos de modo que luego, vistas con anteojos estereoscópicos, tienen apariencia tridimensional.
A finales de los años setenta se atrevió con el diseño de una línea de bolsos con formas de animales elogiados por la crítica estadounidense y adquirido, entre otros, por personajes mediáticos como Elton John o Farah Diba.
Además, a partir de los años ochenta genera pintura que se caracteriza por su vigor gestual y su implicación corporal. A comienzos de aquella década formó parte del grupo de pintores del East Village, junto con Jean Michel Basquiat, David Wojnarowicz y Mike Bidlo, y participó de varias exposiciones grupales y colectivas por el mundo, exhibiendo su obra neoexpresionista.
El encuentro con Juan Navarro Baldeweg y, más adelante, con los exponentes de lo que se llamó 'nueva figuración madrileña', a través de la galería Buades, fue donde Frangella descubrió su imaginario pictórico. Este artista pintó cabezas totémicas y realizó torsos algo que, según el propio Frangella eran "objetos en el espacio".
