Empleados municipales de Cuenca decidirán entre rebajas de sueldo y despidos

El Ayuntamiento de Cuenca llevará a cabo un referéndum entre sus trabajadores para que decidan si les posponen parte de las pagas extras hasta 2017 o despiden a los funcionarios interinos para cumplir el ajuste del plan de pago

El Ayuntamiento de Cuenca llevará a cabo un referéndum entre sus trabajadores para que decidan si les posponen parte de las pagas extras hasta 2017 o despiden a los funcionarios interinos para cumplir el ajuste del plan de pago a proveedores al que se ha acogido el Consistorio.

Así lo dieron a conocer en rueda de prensa la portavoz del equipo de Gobierno, Consuelo García, el concejal de Hacienda, Enrique Hernández Valero y el concejal de Personal, José Ignacio Nicolás, después de que la semana pasada se rompieran las negociaciones con los representantes de los trabajadores.

García explicó que el referéndum entre los trabajadores municipales se llevará a cabo el próximo lunes 23 de septiembre, un día después de las Fiestas de San Mateo, en las que se rememora la reconquista de la ciudad por el rey Alfonso VIII.

En este referéndum podrán participar los más de 600 trabajadores municipales, pero también los concejales del Consistorio conquense, de la oposición y del equipo de Gobierno, y estos últimos harán campaña "para que no haya despidos", indicó García.

Según la portavoz, preguntarán a los trabajadores "si quieren ser solidarios" y reducir hasta un máximo del 25 por ciento en las dos pagas extras los próximos tres años, una cantidad que les será reintegrada a partir del año 2017, también para los trabajadores que se jubilen durante este tiempo.

O, por el contrario si prefieren que sean despedidos los trabajadores interinos, un grupo formado por unas 40 personas, aunque no se explicó cuántos se verían afectados.

El objetivo es conocer "el sentir mayoritario de los trabajadores", indicó García, quien explicó que han trasladado a los representantes de los trabajadores esta posibilidad después de que la semana pasada se rompieran las negociaciones entre ambas partes.

Para García, esta es una alternativa a la política agresiva del Gobierno de Castilla-La Mancha que en muchos casos está recortando el sueldo a sus empleados.

El Consistorio conquense insistió en que para acogerse al plan de pago a proveedores el Gobierno central les obliga a llevar a cabo un plan de ajuste que contempla reducir en un 5 por ciento el capítulo de Personal.

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