La Muestra de Música y Danzas Tradicionales de Cuenca cumple su mayoría de edad

La Muestra de Música y Danzas Tradicionales de Cuenca, organizada por la agrupación Voces y Esparto, alcanzó este sábado su mayoría de edad con un encuentro musical protagonizado por el grupo anfitrión y el grupo portugués de Folklore C.C Do Abitureiras Bairro de Santarem-Ribatejo, que se celebró en el Parque de San Julián con entrada libre.

Según ha recordado Javier Vacas, presidente de Voces y Esparto en declaraciones a Europa Press, ambas agrupaciones se caracterizan "por dedicarse a recoger la auténtica tradición cultural y musical de los pueblos, la raiz". Ambas, ha confesado, "huimos de grandes coreografías de los escenarios".

Dieciocho años después de su creación, el objetivo sigue siendo, según ha explicado el responsable de su organización, "intentar mostrar a la gente la música tradicional y también la indumentaria" que utilizan este tipo de grupos con el fin de preservarla y entre los que se encuentra Miriñake, vinculado a Voces y Esparto y que, según Vacas, "se dedica a recoger la indumentaria típica de todas las comarcas de Cuenca".

A lo largo de su historia, por la muestra han pasado representantes de casi todas las comunidades autónomas junto a otros llegados de países como Francia o Italia, lo que ha permitido, ha explicado su organizador, "que los conquenses hayan podido ver y comparar lo que hacemos nosotros y lo que hacen fuera", algo de lo que, ha añadido, se sienten "orgullosos", al igual que de "seguir adelante con las tradiciones de Cuenca y poder enseñar otras tan diferentes a las nuestras".

Con todo, ha aseverado, "el balance más importante es que seguimos haciendo la muestra", ya que, ha señalado, no reciben "casi ninguna colaboración por parte de ninguna entidad", tan solo el Ayuntamiento.

En este sentido, ha dicho, "el reto es seguir buscando grupos que poder traer a Cuenca para seguir cerrando la Feria de San Julián en el parque con un broche digno".

Con 35 integrantes, Vacas se ha lamentado por la falta de relevo generacional, pues, ha reseñado, "la gente joven ya no quiere tener nada que ver con esto y a los niños los bombardean con otras actividades extraescolares y no tienen tiempo".

Aún así, Voces y Esparto intentan acercar a las nuevas generaciones a tradiciones como la del laúd, la dulzaina o la bandurria, las jotas, las seguidillas o los fandangos.

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