El centenario e histórico tren "Prestige" ha recorrido Castilla-La Mancha para conmemorar el 150 aniversario de la puesta en servicio de la línea ferroviaria Ciudad Real-Badajoz y de la inauguración por la reina Isabel II de la primera relación ferroviaria entre Madrid y Lisboa.
El tren "Prestige", que llegaba ayer a la estación de Puertollano tras partir desde Madrid, ha iniciado hoy la segunda de las siete etapas de su recorrido, que comenzaba también en la estación de la ciudad minera y que concluirá en la estación de Mérida (Badajoz).
Antiguos ferroviarios, amantes de los ferrocarriles y turistas formaban parte del pasaje de este tren con el que se quiere rememorar los primeros años del ferrocarril en España.
El viaje, promovido por la Asociación Extremeña de Amigos del Ferrocarril, en colaboración con la Fundación de los Ferrocarriles Españoles, han organizado siete recorridos.
El "Prestige", según ha explicado a Efe el presidente de la Asociación Extremeña de Amigos del Ferrocarril, Ángel Caballero Muñoz, está formado por cuatro coches restaurante de la antigua Compañía International de los "Wagons-Lits", fabricados entre 1924 y 1929.
El tren es propiedad de la Fundación de los Ferrocarriles Españoles, que tiene su base en el Museo del Ferrocarril de Madrid-Delicias.
Estos vagones, ha explicado, mantienen su interior en su estado original con la marquetería en maderas nobles y estilo art decó.
Los vagones, ha señalado, formaron parte de la composición 'Flèche d'Or', un expreso de lujo que cubría el trayecto París-Calais y continuaba hasta Londres.
Caballero ha señalado que estos vagones, cuando dejaron de circular fueron comprados por Renfe a CIWL con el propósito de formar con ellos una composición de época para realizar trenes chárter de lujo.
El objetivo de estos viajes, ha indicado, "es recordar aquella época y disfrutar de este tren histórico", teniendo en cuenta que en algunos viajes se ofrece la posibilidad de disfrutar de la gastronomía extremeña.
El tren que, además de Puertollano, hará paradas en Almorchón, Badajoz, Mérida, la estación de Arroyo de Malpartida, Cáceres, la estación de Monfragüe y Plasencia, retornará a Madrid.
A pesar de su antigüedad, este tren, ha explicado Caballero, está preparado para poder circular a 160 kilómetros por hora.
Entre los pasajeros que hoy se han subido al tren se encontraban también miembros de la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Ciudad Real o algunos antiguos ferroviarios que durante décadas estuvieron ligados al trazado de la línea Ciudad Real-Badajoz.
Este es el caso de Antonio Cano Cabeza, un maquinista jubilado de Renfe que a sus 78 años, acompañado de su mujer, Pilar Cano Supervía, ha vuelto a recordar aquellos años en los que él, conduciendo entonces otros trenes, se encargaba de llevar pasajeros entre Ciudad Real y Badajoz.
Antonio Cano ha asegurado a Efe que para él era muy gratificante el poder realizar este viaje, porque, por un lado, iba a poder pisar el pueblo donde nació, la antigua estación de Almorchón, e iba a poder acabar el trayecto en el pueblo donde nació su madre, Mérida.
Antes de partir de la estación de Puertollano, su mujer ha recordado cómo su marido había realizado ya este recorrido en muchas ocasiones durante su etapa de fogonero, antes de ser maquinista, y cómo de este trayecto mantiene muchas anécdotas y recuerdos que no dejan de contar a sus nietos.
