La Plataforma 'Autovía Ciudad Real-Toledo' ha reclamado este lunes la Consejería de Fomento que haga realidad el desdoblamiento de la carretera de titularidad estatal N-401 que enlaza las dos capitales castellanomanchegas.
Así se lo ha transmitido la Plataforma ciudadana, creada el pasado mes de diciembre, a la consejera, Elena de la Cruz, y al director general de Carreteras y Transportes, David Merino, en la reunión que han mantenido en Toledo.
El proyecto fue negociado por anteriores gobiernos regionales con el estatal a través de un desdoblamiento mixto (Estado-Comunidad), correspondiéndole al Gobierno de España la ejecución del tramo entre Ciudad Real y Urda y al de Castilla-La Mancha el comprendido entre Urda y Consuegra, que se encuentra en el punto más avanzado posible, destaca la Junta en un comunicado.
Los miembros de la plataforma ha llamado la atención sobre los problemas de seguridad que afectan al trayecto situado al sur donde, según los datos que manejan, se concentra el mayor número de siniestros y el mayor riesgo debido a la intensidad de los viajes de corto recorrido entre la capital ciudadrealeña y las localidades de Fernán Caballero, Malagón y Fuente el Fresno.
Por eso, han demandado que se pida al Ministerio una actuación previa para construir una variante para alejar la carretera del casco urbano.
La consejera ha concretado que las modificaciones realizadas en el trazado inicial, a consecuencia de los problemas medioambientales que presentaba el desdoblamiento de la actual N-401 en su trayecto íntegro, ha supuesto la puesta en marcha de un plan alternativo por parte del Ministerio de Fomento, que aún está pendiente de redactar y someterlo a una nueva Declaración de Impacto Ambiental.
El nuevo proyecto, ha agregado, esquiva los Montes de Toledo para aprovechar el trazado actual de la autovía CM-42 (de los Viñedos) entre Toledo y Consuegra, desde donde empieza el desdoblamiento de nueva construcción.
De la Cruz ha considerado que, en el escenario más optimista, el Ministerio tardaría no menos de tres años en completar los trámites que le corresponden, por lo que se ha ofrecido a intermediar ante el Gobierno de España para solicitar una auditoría de seguridad vial de la N-401 de manera inmediata.
"El objetivo es que el Estado tenga información de primera mano de los puntos y de las situaciones de riesgo prioritarias y pueda tomar decisiones urgentes mientras concluye la tramitación que le corresponde", ha reseñado.
También ha aclarado que el tramo que corresponde al Ejecutivo regional "está en un punto desde el que no puede avanzar más mientras el Estado no desbloquee su parte del proyecto".
La consejera ha estimado que "las actuaciones de menor calado solicitadas en paralelo" no tienen por qué comprometer el futuro desdoblamiento sino "poner solución a los problemas más acuciantes de seguridad vial en los puntos más perniciosos de la autovía".
